Vuelven los fantasmas de la huelga docente del 2017 que duró más de dos meses, acicateada por las pugnas internas en el sindicato de maestros. Esta vez son dos facciones regionales de profesores las que amenazan con paralizar sus labores de forma indefinida desde el lunes 18 de junio. ¿La razón? Supuestos incumplimientos salariales y laborales por parte del Ministerio de Educación (Minedu).
Una de esas facciones la lidera el secretario general de las bases regionales del Sute, Pedro Castillo, quien lideró la cuestionada huelga del año pasado que se extendió más de 70 días. La otra la encabeza el dirigente del Suter Cusco, Ernesto Meza Tica.
Pero el secretario general del Sindicato Único de Trabajadores de la Educación del Perú (Sutep), Alfredo Velásquez, dijo que este gremio, el principal del país, rechaza la anunciada medida de fuerza. "La opinión pública debe saber que el Sutep está luchando dentro de la mesa de negociación colectiva, y nosotros somos los únicos que hemos presentado un pliego de reclamos hasta el 30 de noviembre, que era el plazo, y luego hemos entablado un trato directo", dijo el dirigente en Canal N.
Velásquez sostuvo que el único gremio reconocido es el Sutep, y que como tal, ellos han apostado por el diálogo y que mientras este proceso siga en marcha, no se pueden acatar huelgas porque de inmediato se suspenden las conversaciones con el Minedu. Esta división en el magisterio fue lo que dificultó la solución de la huelga de 2017.
"El año pasado hubo un desfase de desinformación y, por eso, nosotros estamos yendo a todas las instituciones a nivel nacional para informar que sí hay avances en la mesa de negociación", explicó Velásquez.
El pliego de la negociación colectiva a la que alude el Sutep incluye capacitaciones previas a la evaluación de desempeño docente, la jubilación anticipada a los 55 años y el aumento del piso salarial a más de 3.500 soles este año. La fecha límite para llegar a un acuerdo es el 5 de junio, día en el que el Minedu deberá responder las demandas del gremio magisterial.
En caso no se llegue a un acuerdo aquel día, el sindicato podría ir a un arbitraje o evaluar una huelga. Es decir, la medida de fuerza no está descartada, pero es una decisión que se tomará en una asamblea nacional de las bases del Sutep, prevista pare el 8 y 9 de junio.
¿Cómo neutralizar entonces a las facciones que ya anunciaron la paralización? El presidente Martín Vizcarra anunció que el jueves el ministro de Educación, Daniel Alfaro, tiene previsto reunirse con el dirigente Pedro Castillo. "Ya está la amenaza de paro. El Minedu se reunirá con Castillo para explicarle cuál es la estrategia. Para los reclamos económicos, llegaremos hasta donde dé el presupuesto", dijo el jefe de Estado.
Por su lado, Alfaro dijo que en las conversaciones que vienen manteniendo con la dirigencia nacional y regional del magisterio se acordó que las clases no se van a interrumpir. "Ya tuvimos una primera reunión con Castillo y otros dirigentes", dijo, al señalar que el Minedu ha tomado nota de las inquietudes que estas facciones para evaluarlas.
Sin embargo, en el Sutep no ven con buenos ojos que el Gobierno se siente en una mesa a conversar con Castillo Terrones, porque es debilita el sindicato nacional y afectaría la negociación colectiva. "La división del magisterio es responsabilidad del Gobierno, que debería conversar con los legalmente reconocidos", advirtió la dirigencia del mayor gremio magisterial.
En tanto, la facción del dirigente del Cusco Ernesto Meza exige el cumplimiento de los acuerdos pactados con la exministra de Educación Marilú Mártens y sostuvo que a la huelga anunciada se sumarán maestros de Tumbes, Piura, Lambayeque, La Libertad, Pasco, Arequipa, Lima Provincias y Cajamarca. "La semana pasada nos reunimos con el ministro de Educación y se comprometió a dar soluciones", dijo el dirigente.
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