Tras una larga sesión que empezó a las 10 de la noche del sábado, a las 5 de la madrugada de este domingo 18 de marzo el Primer Juzgado de Investigación Preparatoria de la Sala Nacional aprobó el pedido de impedimento de salida del país de Jaime Yoshiyama, Augusto Bedoya y Ricardo Briceño por 18 meses. La solicitud de esta medida estuvo sustentada por el fiscal José Domingo Pérez por el presunto delito de lavado de activos.

El fiscal de Lavado de Activos, José Domingo Pérez, pidió al juez Richard Concepción Carhuancho que no les permita salir del país por tratarse de una investigación por presunto crimen organizado. "No pedimos 36 meses, que correspondería según ley, porque ya estamos con algunos meses de investigación. Estos 18 meses son variables, pueden ser menos", dijo el fiscal Pérez.

El juez Concepción Carhuancho dictó la resolución que argumenta que existen elementos de convicción que vincularían a los investigados con el delito de lavado de activos. Como era de esperarse, la defensa de los tres investigados afirmó que apelará la decisión. 

En el caso de Yoshiyama y Bedoya, el juez tomó en cuenta que ambos viajaron a Estados Unidos días antes de que Jorge Barata declarar que ellos recibieron dinero de Odrebrecht para la campaña presidencial de Keiko Fujimori en el 2011. Luego de la polémica, regresaron al país.

Yoshiyama dijo que había viajado para atenderse por un herpes en el ojo, pero solo mostró un certificado de atención médica en emergencia en una clínica para indigentes, varios días después de su viaje. El juez le pidió a la abogada que muestre certificados que prueben que su patrocinado se atendía con anterioridad, para justificar próximas salidas del Perú. Sin embargo, la defensa de Yoshiyama no pudo mostrar ninguna prueba de ello.

Además, cuando la Fiscalía allanó el domicilio de Yoshiyama, no abrieron la puerta, tuvieron que ingresar a la fuerza, encontraron documentos en el baño, cajones que hacían referencia a la investigación contra el partido fujimorista pero que estaban vacíos e intentaron llevarse una computadora en un auto. 

En el caso de Briceño, como presidente de la Confederación Nacional de Instituciones Empresariales Privadas (Confiep) firmó una donación de 200 mil dólares que Odebrecht dio a este gremio empresarial. Según Briceño, él ya había renunciado a la presidencia de esta institución pero lo hizo por una cuestión administrativa. El actual presidente de la Confiep, Roque Benavides, reconoció que el gremio recibió este monto y que ese dinero fue usado para una campaña contra Ollanta Humala, pero no a favor de Keiko Fujimori (¿?), cuando ambos competían en la segunda vuelta electoral del 2011.

La audiencia se desarrolló en el marco de las investigaciones por el presunto delito de lavado de activos que se sigue a Fuerza Popular. El pedido se sustentó en las recientes declaraciones del exsuperintendente de Odebrecht en Perú, Jorge Barata, quien señaló a Yoshiyama, Bedoya y Briceño como los receptores de dinero de la empresa brasileña para financiar la campaña de Fujimori. 


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