Pese a lo que muchos creen, la prostitución no es un delito en el Perú si lo ejercen personas con mayoría de edad y de manera voluntaria. Esto a diferencia de la trata de personas, que sí es un delito penado y debe ser perseguido por las autoridades del país.
"Es algo autónomo y lo decidimos porque, bueno, somos mayores de edad y así como una persona decide ser abogada, otra decide ser trabajadora sexual. Así lo hemos decidido, por dinero o porque lo creímos conveniente", explicó Azucena Rodríguez, coordinadora nacional de la Redtrasex - Perú, a El Comercio.
Uno de los objetivos de este gobierno es formalizar el empleo en el Perú, pero en este aspecto no se incluye a las trabajadoras sexuales, que no cuentan con una norma que les permita figurar en la planilla de alguna empresa, pagar impuestos y tener jubilación como cualquier otro trabajador.
Ante esta realidad la Redtrasex-Perú impulsa la promulgación de un reglamento que les permita formalizarse y obtener los beneficios y deberes que el empleo formal implica.
"No estamos de acuerdo con una zona rosa. Pero sí con regular nuestro trabajo para que sea considerado como cualquier otro. Que paguemos impuestos. Nosotras a los 50 años seguimos trabajando, sin ningún beneficio. Queremos crear un sindicato, estar en regla con la ley y que no nos correteen ni nos maltraten", detalló Rodríguez.
En la actualidad, lo único que se necesita para ejercer la prostitución en prostíbulos como Las Cucardas, El Bote, La Salvaje, entre otros, es ser mayor de edad y tener carnet de sanidad. Según contó Rodríguez, esos negocios cuentan con licencias municipales y se les exige a sus trabajadoras una prueba de VIH.
Sin embargo, estos requerimientos no son una obligación para aquellas que brindan servicios sexuales en las calles. Evidentemente, este es un peligro para la salud, tanto de las trabajadoras como de sus clientes. "Por eso [la Redtrasex – Perú] tiene promotoras que van a las calles y a los bares. Conversamos con las compañeras y las llevamos a que pasen por un control médico", contó Rodríguez.
Para la coordinadora de Redtrasex no será necesaria la creación de empresas dedicadas al rubro de servicios sexuales, sino que puedan pagar sus impuestos y seguros de manera independiente. "Hoy nadie nos da crédito, por ejemplo. Pero ya siendo trabajadoras y pagando nuestros impuestos tendríamos más garantías", dijo.
Trata de personas
Rodríguez no niega la existencia de la trata de personas y contó que muchos hombres traen a chicas menores de edad de la selva y las ponen a trabajar como prostitutas. Según la coordinadora, estas jóvenes que son retenidas durante las batidas vuelven al día siguiente.
"También hay bares donde las chicas tienen un horario, las retienen. Recién les dan su dinero cuando terminan su jornada [lo cual es rufianismo]. Las chicas saben que el dueño de ese local es un explotador y un proxeneta, pero ninguna denuncia. Les conviene trabajar ahí porque ganan su plata", consideró.
No obstante, el ofrecimiento de servicios sexuales de menores de edad es un delito y comete delito también quien lo promueve y lo toma. Un problema social que debe ser atendido, pues solo en el último año se ha detenido a 107 tratantes y se ha rescatado a 339 víctimas, de las cuales 70 eran extranjeras.
La semana pasada se aprobó el nuevo Plan contra la Trata de Personas 2017-2021. "Por primera vez, por ejemplo, se dispone que todas las instituciones involucradas cuenten con un presupuesto específico para su implementación y eso es importante", dijo Carlos Basombrío, ministro del Interior.
(Foto de portada: El Comercio)
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