Lo acusan de apoyar el terrorismo y han decidido romper vínculos. Arabia Saudita, Egipto, Bahréin, Emiratos Árabes Unidos, Yemen y Libia rompieron, este lunes, sus relaciones con Qatar por su presunto "apoyo a varios grupos terroristas y sectarios que tienen como objetivo desestabilizar la región", incluyendo al Estado Islámico (ISIS) y Al Qaeda. Qatar ha negado categóricamente estas acusaciones.
"Ante la insistencia del Estado de Qatar de continuar socavando la seguridad y la estabilidad de la región y su incapacidad para cumplir con los compromisos y acuerdos internacionales, se ha decidido tomar las siguientes medidas necesarias para salvaguardar los intereses de los países del Consejo de Cooperación del Golfo y el pueblo qatarí", detalla un comunicado divulgado en la últimas horas por Emiratos Árabes Unidos.
Riad, la capital de Arabia Saudita, por su parte, también acusa a Doha, la capital de Qatar, de apoyar a grupos como la "Hermandad Musulmana" y colaborar con milicias apoyadas por los iraníes.
Este anuncio se produce en medio de las tensiones por el presunto hackeo de la agencia de noticias oficial de Qatar, el mes pasado, y es una muestra de las divisiones entre los aliados de Estados Unidos en el Golfo Pérsico por su relación con Irán, informó BBC Mundo.
Los primeros en anunciar la decisión fueron Bahréin y Arabia Saudita. Luego, se le sumaron los gobiernos de Emiratos Árabes Unidos (EAU), Egipto, Yemen y Libia.
Entre las medidas adoptadas por estos países están el cese de todas las relaciones con las autoridades qataríes, la ruptura de relaciones diplomáticas y la expulsión del personal diplomático.
Emiratos Árabes Unidos le dio a los diplomáticos qataríes 48 horas para dejar el país. Por su lado, Arabia Saudita, EAU y Bahréin dieron a los ciudadanos qataríes dos semanas para abandonar sus territorios. Estos tres aliados anunciaron, además, el cierre de su espacio aéreo para Qatar Airways, que ya suspendió sus vuelos a Arabia Saudita, informó BBC Mundo.
Las aerolíneas Eithad Airway, Emirates y FlyDubai dijeron que iban a suspender todos sus vuelos hacia y desde Doha a partir del martes.
Los precedentes
Estas decisiones reflejan los problemas que Arabia Saudita, Bahréin y Emiratos Árabes Unidos tienen desde el 2014. En ese año, retiraron durante varios meses a sus embajadores en Doha en protesta por su supuesta interferencia en asuntos internos.
Esta situación se agravó con la publicación de supuestos comentarios de hace dos semanas del emir de Qatar, Sheikh Tamim bin Hamad al-Thani, en los que criticaba a Arabia Saudita. Por supuesto, el gobierno de Doha desmintió dichos comentarios y las atribuyó a "un desvergonzado crimen cibernético". Los vecinos de Qatar procedieron a bloquear el acceso a los sitios informativos se ese país como Al Jazeera.
Con sello Trump
De acuerdo a BBC Mundo, Donald Trump, durante su reciente visita a Arabia Saudita, instó a los países musulmanes a que asumieran el liderazgo en la lucha contra la radicalización y culpó a Irán por la inestabilidad en el Medio Oriente.
Según Kristian Ulrichsen, en entrevista con Reuters, Trump habría convencido que era elmomento de lidiar "con el enfoque alternativo".
"Y parece que sauditas y emiratíes se sienten fortalecidos por el alineamiento entre sus intereses regionales -hacia Irán y el islamismo- y los de la administración Trump", dijo.
El canciller estadounidense, Rex Tillerson, por su parte, pidió a los países resolver sus diferencias mediante el diálogo.
"No espero que esto vaya a tener ningún impacto significativo, o de cualquier tipo, sobre nuestra lucha compartida contra el terrorismo en la región o a nivel global", señaló Tillerson.
Qatar aseguró que la decisión de sus vecinos "no va a afectar la vida normal de sus ciudadanos y resientes". Pero la bolsa de valores registró importantes pérdidas el lunes por la mañana, informó BBC Mundo.
(Foto de portada: BBC Mundo)