"Si él mismo incumple de forma tan abierta los elementos básicos de la función pública, qué podemos esperar del resto", refirió el presidente de Transparencia Internacional, José Ugaz, sobre el cuestionado Contralor General de la República, Edgar Alarcón, quien los últimos días se ha visto fuertemente comprometido tras las denuncias de compra de 90 autos y presuntos pagos irregulares a una exfuncionaria que es madre de dos de sus hijos.

“Estamos hablando del funcionario de más alto nivel del Estado que tiene la responsabilidad de velar por el adecuado funcionamiento de la administración pública. Si él mismo incumple de forma tan abierta los elementos básicos de la función pública, qué podemos esperar del resto”, declaró a la Agencia Andina.

“Creo que está totalmente descalificado para ese cargo”, puntualizó Ugaz.

Para Ugaz, el contralor se encuentra en una situación muy delicada, debido a que tendría que haber sabido que no podía tener negocios propios cuando ya era un alto funcionario de la Contraloría. “Además, en los audios que han pasado intenta desviar el curso natural de una investigación llamando al funcionario encargado para que, en aras de la amistad, retire la denuncia. Se supone que tiene que velar por la recta función pública, pero Edgar Alarcón ha demostrado todo lo contrario”, enfatizó.

Esta situación ha hecho que la imagen de órgano de control del Estado se vea afectada, por ser una institución cuya credibilidad se basa en su prestigio y que ahora requiere de una reestructuración a fondo.

“No está cumpliendo con lo que se espera de ella, en un país con un alto nivel corrupción se le han pasado todos los temas por delante y no ha sido responsable de ninguna investigación. Todos los casos han sido descubiertos por la prensa o denuncias privadas”, refirió Ugaz.

“La Contraloría requiere una profunda reestructuración, refundación, o pensar otro sistema de control porque está que hace agua por todos lados, empezando por la cabeza”, añadió.

En opinión del titular de Transparencia Internacional, no existe un ánimo de venganza detrás de las denuncias contra el contralor. "Las pruebas están ahí, ¿venganza por dónde puede haber? No lo sé. De pronto su alta exposición a raíz de Chinchero lo ha puesto en una situación de mayor vulnerabilidad frente a la opinión pública, pero también es verdad que su informe es muy cuestionado", indicó.

De otro lado, Ugaz consideró que el informe de Chinchero expuesto por Alarcón evidencia poca calidad y seriedad al momento de llegar a las conclusiones porque habla de delitos, pero no exhibe ningún solo indicio de responsabilidad penal de los supuestos implicados.

(Foto de cabecera: Andina)

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