Cancilleres del Grupo de los Siete (G7) , de los países más industrializados del mundo, se reunirá en la ciudad amurallada de Lucca, Toscana, Italia. El fin principal de esta reunión será presionar a Rusia para que retire el apoyo al Gobierno de Bashar Al Assad.
Según la fuente consultada por el diario británico The Telegraph, se trata de un proyecto estadounidense-británico que incluirá una oferta tácita a Rusia para volver a unirse al grupo. El G8 suspendió la membresía de Moscú en el club en 2014 en represalia por la adhesión de la península de Crimea a Rusia, convirtiéndose así el bloque en el G7 quien es conformado por Italia, Alemania, Estados Unidos, Japón, Reino Unido, Francia y Canadá.
La reunión comenzará este lunes a las 4 pm hora local y con fines de preparación para la cumbre de mayo en la ciudad de Taormina, Sicilia.
El inicio del conflicto internacional comenzó con el bombardeo a la localidad de Jan Sheijun —en la provincia de Idlib, en Siria, la cual está bajo control rebelde—, y en el que murieron al menos 72 personas, incluidos 20 niños, como consecuencia de la exposición a agentes químicos.
Ello trajo consigo, la orden de Trump para el lanzamiento de 59 misiles contra el aeródromo militar de Shayrat, la primera intervención directa de los EEUU en el conflicto sirio, con el saldo de 16 víctimas mortales, 9 civiles -entre ellos 4 menores- y 7 militares, según la agencia oficial siria y el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos.
El canciller italiano, Angelino Alfano, dijo que el amplio respaldo de Europa a los ataques militares estadounidenses contribuyó a una “renovada armonía” entre Washington y sus socios.
Por otra parte, el régimen sirio recibió este domingo el apoyo de sus aliados, Rusia e Irán, que cerraron filas frente a "la agresión de Estados Unidos" contra el país árabe.
"Estamos preparados para responder a cualquier agresión o transgresión de las líneas rojas por parte de cualquiera, EEUU conoce bien nuestras capacidades de respuesta", advirtió la Sala de Operaciones Conjunta de Rusia e Irán y de las Fuerzas Aliadas en Siria en un comunicado.
Será la primera cumbre de ministros de Exteriores del G-7 para Rex Tillerson desde el inicio del Gobierno de Trump. Los políticos también hablarán de la inestabilidad en Libia, de la intención de Corea del Norte de seguir desarrollando su programa nuclear y balístico, de las relaciones con Rusia, de la crisis en Ucrania, la situación en Irak y a la integración plena de Irán en la comunidad internacional.
La tensión política entre los líderes internacionales sigue en aumento con el posicionamiento de Corea del Norte condenando su accionar. Al parecer, las negociaciones entre los cancilleres tienen un largo camino para buscar la paz.
Imagen de cabecera: EFE
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