La orden ejecutiva del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, para prohibir la entrada a su país de refugiados e inmigrantes de siete países musulmanes ya ha tenido sus primeras consecuencias y ha desatado una crisis que amenaza con crecer en los próximos días.
Por lo pronto, dos ciudadanos iraquíes ya han sido detenidos en el aeropuerto Kennedy de Nueva York, pese a contar con peticiones de asilo aprobadas, según reportó el New York Times, que sostiene que así como estas dos personas, hay decenas que ya tienen la luz verde para iniciar una nueva vida en EEUU, pero la orden ejecutiva de Trump los ha sorprendido en pleno vuelo.
A estos se suman los cientos de estudiantes y trabajadores con visados en regla que no podrán regresar a EEUU. Incluso, medios locales señalan que las aerolíneas están informando a sus pasajeros de los países sobre los que recae el veto que solo podrán embarcarse los que tengan permisos diplomáticos.
(NYT).
El decreto de Trump bloquea las admisiones de todos los refugiados en los próximos cuatro meses, y también prohíbe la entrada de inmigrantes de siete países de mayoría musulmana durante 90 días. Las naciones afectadas por la medida son Irak, Siria, Sudán, Irán, Libia, Somalia y Yemen.
Principio de reciprocidad
En tanto, Irán anunció este sábado que aplicará el principio de reciprocidad a Estados Unidos tras el veto del presidente Trump, quien alegó que su polémica medida busca impedir, supuestamente, la llegada de "terroristas".
“La República Islámica de Irán, para defender los derechos de sus ciudadanos y hasta que se solucionen todas las limitaciones insultantes de Estados Unidos contra los nacionales iraníes, aplicará el principio de reciprocidad”.
Las autoridades iraníes precisaron que su medida estará vigente hasta que Washington levante la prohibición para los ciudadanos iraníes. El Ministerio de Relaciones Exteriores de este país calificó la medida de Trump como un "insulto flagrante a los musulmanes del mundo" y agregó que lo único que fomentará es la "la propagación de la violencia y el extremismo".
Ausente en los Oscar
Otra consecuencia del veto del magnate xenófobo es la inminente ausencia del cineasta iraní Asghar Farhadi, nominado al Oscar por la cinta El viajante. Farhadi es reconocido como uno de los mejores directores del mundo, y su trabajo genera respeto y admiración.
Asghar Farhadi (derecha), con Shahab Hosseini, en el rodaje de 'El viajante'.
Pero ahora no podrá acudir a la gala pese a ser uno de los favoritos para llevarse la estatuilla a la mejor cinta de lengua no inglesa, galardón que ya ganó en 2012 por Nader y Simin, historia de una separación.
Así lo confirmó en su cuenta de Twitter Trita Parsi, el presidente del Consejo Nacional Iraní Estadounidense, una organización que promueve las relaciones entre los dos países.
Al respecto, el festival de cine de Tribeca, fundado por Robert de Niro en 1988, expresó su indignación, también en Twitter. "Es descorazonador e inaceptable".
En tanto, la protagonista de El viajante, Taraneh Alidoosti, ya anunció que no irá a la ceremonia como protesta por las medidas sobre inmigración de Trump, al que considera "racista". Incluso, busca boicotear la gala de los Oscar.
Taraneh Alidoosti en 'El viajante'.
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