Este miércoles Walter Gutiérrez juró como nuevo Defensor del Pueblo tras una elección que, aunque mayoritaria en el Congreso, no estuvo exenta de polémica desde distintos sectores de la sociedad civil, precisamente aquellos cuyos derechos deberá proteger.

Quizá motivado por esa preocupación, el defensor saliente Eduardo Vega se refirió en una columna publicada en el diario El Comercio a uno de los temas que necesitan ser tratados con mayor fuerza desde el despacho que asumió de manera interina por más de cinco años: la defensa de los derechos de las personas LGTBI.

Vega recordó a datos de la Comisión Interamericana de DDHH respecto a la realidad que sufren los miembros de esta comunidad, a la que calificó como "una situación de discriminación, exclusión social y desprotección por parte del Estado que tiene que acabar".

"Según la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, en el Perú se produjeron 17 asesinatos y siete agresiones a la integridad de estas personas en el 2013 y la fiscalía y el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos identificaron al menos 38 muertes violentas entre el 2012 y 2014".
"Pero no solo la vida y la integridad de las personas LGBTI son vulneradas. También afrontan un grave estigma en los servicios de salud, serios problemas para el reconocimiento de su identidad de género, ‘bullying’ homofóbico en las escuelas y dificultades en el acceso a trabajos dignos (...) No podemos aceptar que la respuesta hacia las personas LGBTI sea la incomprensión, la indiferencia y la negación de su dignidad como personas". 

En ese sentido hace referencia a la utilidad del Informe Defensorial Nº 175 "Derechos humanos de las personas LGBTI: Necesidad de una política pública para la igualdad en el Perú", presentado hace una semana y en el que se plantea una serie de recomendaciones al Estado peruano para atender de forma correcta las demandas de las personas LGTBI.

[Lee el informe aquí]

Señaló que es importante que también hacer incidencia en el tema educativo, ya que será la única manera de dejar de lado los prejuicios y estereotipos en torno gays, lesbianas, trans y bisexuales.

"Tenemos que despojarnos de nuestros prejuicios hacia la comunidad LGBTI y optar por construir una sociedad inclusiva y respetuosa de la diversidad. La igualdad en democracia es el único camino que genera cambios trascendentes en la vida de las personas. Por ello, tenemos que luchar contra la indiferencia y el odio y enfrentar la discriminación hacia este colectivo de personas".

¿Atenderá y adoptará como propias estas ideas el nuevo Defensor del Pueblo o seguirá siendo la comunidad LGTBI una de las más ignoradas incluso por las instituciones que debería protegerla?


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