"Sobre su escritorio reposan varios libros. El humo del cigarro invade el espacio de la pantalla en blanco. Cerca del mouse de la computadora, un cenicero atesora las colillas de media cajetilla. Se levanta. Da un par de vueltas a la habitación. Balbucea unas frases que, aparentemente, no tienen conexión. Vuelve a sentarse. Hace tronar sus dedos. Mueve su cabeza. Empieza a teclear".

Estas palabras inventadas reflejan un instante de la jornada de un escritor. Construir una arquitectura narrativa o poética no es una labor fácil. Largas horas frente a una pantalla en blanco no es la escena preferible para un fin de semana, por ejemplo. No olvidemos tampoco que en países como el nuestro, los autores deben alternar su vocación con los trabajos alimenticios. Así, la escritura puede tener los más disimiles horarios. 

El ímpetu por escribir de los autores nóveles tiene una recompensa cuando una editorial accede a publicar su obra. No obstante, esa vehemencia creativa puede tener otro puerto exitoso: la obtención de un premio literario. 

En nuestro país, uno de los galardones más respetados del medio literario es el Premio Copé, cuya actual convocatoria (XIX Bienal de Cuento y V Bienal de Cuento) vence el próximo 12 de agosto. 

En el terreno del cuento, la tradición de este certamen -organizado por Petroperú- se remonta a 1979, cuando se llevó a cabo el primer llamado. Su importancia radica en la calidad de sus jurados (entre los que destacan los críticos literarios Estuardo Núñez y Ricardo González Vigil), pero, sobre todo, en la de sus ganadores. Aquí compilamos a cinco de ellos. 

WASHINGTON DELGADO 

Cuento premiado (1979): La muerte del Dr. Octavio Aguilar 

Punta de lanza de la poesía peruana de la segunda mitad del siglo XX, Washington Delgado demostró dominar el género cuentístico en la primera edición de la Bienal de Cuento. No sería el único que escribiría. El autor de importantes poemarios -como Formas de Ausencias (1954) y Destierro por vida (1970)- publicó otro relatos como Los relojes de la tía Carolina o Mi primo Luis y su prima Luisa. 

JULIO ORTEGA

Cuento premiado (1981): Avenida Oeste

Si hay un nombre representativo de la crítica literaria latinoamericana, ese es Julio Ortega. Conocido principalmente por su trabajo académico, el literato nacido en Casma (1942) ha incursionado en diferentes géneros literarios como la novela (Adiós Ayacucho y Habanera), la poesía (De este reino) y el teatro (El instruso, La campana). Entre sus trabajos críticos destacan El discurso de la abundancia (1992), Arte de innovar (1994) y Retrato de Carlos Fuentes (1995). Desde 1989 es catedrático en la Universidad de Brown. 

JOSÉ DE PIÉROLA

Cuento premiado (2000): Lápices

Tras residir siete años en los Estados Unidos, este ingeniero de profesión decidió cambiar de dirección e iniciar una carrera literaria que, en la actualidad, ya cuenta con varios títulos en su haber como Máquina del tiempo (2015), Summa caligrámatica (2009), El camino de regreso (2007), entre otros. Luego de haber consolidado su narrativa, se dedicó a transmitir sus conocimientos a otros en la Maestría de Escritura Creativa de la Universidad de Texas. 

CHRIST GUTIÉRREZ-RODRÍGUEZ

Cuento premiado (2012): Los caminantes de Sonora

Nacido en 1982, obtener el Copé de Cuento significó para Gutiérrez- Rodríguez entrar con 'buena estrella' en el medio literario peruano. Su triunfo llamó la atención de las editoriales y dos años después publicó Las siete bestias (Animal de invierno). 

JOHANN PAGE

Cuento premiado (2014): Patrimonio

El autor de Los puertos extremos (2004) reconoció en una entrevista -tras ser declarado ganador de la más reciente Bienal de Cuento- que envió muchos textos al Premio Copé. Lo suyo fue, entonces, una consolidación de la perseverancia. Tras ser premiado, publicó, un año después, su segundo cuentario: Todo termina esta noche (Peisa).

[Foto de portada: Petroperú]

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