La Defensoría del Pueblo se pronunció finalmente este lunes sobre la sentencia dictada por la Corte Superior de Justicia de Ayacucho contra Adriano Pozo, quien en julio de 2012 agredió brutalmente a su expareja, Arlette Contreras en un hotel de dicha ciudad, legando incluso a arrastrarla por los suelos jalándola de los cabellos.
A través de un comunicado el Defensor del Pueblo, Eduardo Vega, rechazó la decisión judicial y demandó una pena más severa para este tipo de delitos.
"Es indignante un fallo de esta naturaleza cuando ha sido pública la forma en que esta joven fue ferozmente violentada y agredida, afectándose su integridad física y psicológica. El Estado en su conjunto debe dar señales claras y ejemplares contra toda forma de violencia en agravio de las mujeres".
Informó que la Defensoría intervendrá en el proceso de apelación de la sentencia con el fin de proteger los derechos de la joven. En ese sentido Vega hizo un llamado de atención sobre la imagen que con este tipo de decisiones está dando el Poder Judicial en nuestro país.
"Este tipo de decisiones perpetúan la impunidad, favorecen la aceptación social de este tipo de actos y generan sentimientos de desconfianza, vergüenza, culpa y miedo en las mujeres víctimas de violencia, desalentándolas a denunciar al sentirse desprotegidas".
A través de su cuenta en Twitter la institución también hizo un llamado a que este tipo de actos sean juzgados como lo que son 'tentativas de feminicidio'.
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