Un año después la pesadilla parece no terminar para Cindy Arlette Contreras Bautista, sino que por el contrario, parece recrudecerse. Luego que hace solo unos días su expareja Adriano Manuel Pozo Arias fuera sentenciado únicamente a un año de prisión suspendida pese a la existencia de un video en el que se ve claramente como la agrede físicamente y la arrastra de los cabellos al interior de un hotel en Ayacucho, la joven ha decidido no quedarse de brazos cruzados y ha optado por los medios de comunicación para hacer público su temor a que atenten contra su vida. 

Este lunes en entrevista a CanalN, Arlette responsabilizó tanto a Adriano Manuel Pozo como a su familia de cualquier daño del que pueda ser víctima y confesó tener temor desde que se enteró que quien fue su enamorado estaría libre como si nada hubiese ocurrido.

"¿Cómo no voy a temer con tantas irregularidades? ¿Cómo no voy a temer cuando Adriano ha intentado matarme? ¿Cómo no voy a temer si tienen tanto poder de lograr una sentencia absolutoria a ese nivel? (...) Responsabilizo a Adriano y a su familia. A su padre, a su familia en su totalidad y si en algún momento me pasa algo, es de parte de ellos y de su gente. Porque son muchas las personas que están alrededor de él, son muchas las conexiones que tienen ellos, es como una telaraña". 

La joven consideró que esto no se trata solo de una lucha contra una familia sino que busca obtener justicia y sentar un precedente para todas aquellas mujeres que han pasado por lo mismo que ella y que no tienen pruebas contundentes para defenderse.

"Yo no me estoy enfrentando únicamente a ellos para hacer valer mis derechos. Es contra todo un sistema de corrupción que no solamente lo experimento yo. Me imagino qué pasará con otras mujeres que no tienen un video, que no pueden salir a hablar".

En ese sentido, minutos antes el viceministro de Derechos Humanos, Ernesto Lechuga, había intervenido haciendo un llamado de atención al terrible precedente que ha sentado la justicia ayacuchana al haber optado por una pena tan benevolente pese a las pruebas existentes en el caso.

"Hay un sentimiento de impunidad en la sociedad, realmente este fallo ha mandado un pésimo mensaje porque si hemos visto todos los peruanos este video donde es agredida violentamente con consecuencias inimaginable si no hubiera sido por la intervención de los empleados del hotel. Si existiendo el video no se ha podido condenar, ¿qué vamos a pensar en los miles de casos de maltrato a la mujer que existen y donde no tienen un video para defenderse?".