Al menos 18 personas murieron y otras 45 resultaron heridas tras una explosión con coche bomba ocurrida en Ankara, la capital de Turquía. El incidente se produjo contra dos autobuses militares que trasladaban soldados a una casa cuartel.

Las autoridades informaron que se trata de un ataque terrorista, aunque aún desconocen la autoría del mismo. 

Según fuentes de la seguridad turca, hay indicios que señalan que los insurgentes del PKK podrían estar detrás del atentado, sin embargo, las fuerzas separatistas de seguridad en Turquía apuntan a que se trataría del Estado Islámico. 

Cabe indicar que después de la explosión, el fuego alcanzó al menos tres vehículos empleados también para transportar a los uniformados, por lo que las autoridades estiman que el número de víctimas podría aumentar en las siguientes horas. 

La televisión turca NTC también ha señalado que la explosión tuvo lugar al paso de un vehículo con militares al interior. Asimismo, la CNN turca ha mostrado una larga columna de humo saliendo de un edificio y muestran vehículos militares en llamas.

En ese sentido, el primer ministro Davotoglu pospuso su viaje a Bruselas, donde tenía planeado participar en la cumbre de líderes de la Unión Europea centrada en la crisis de refugiados. 

Cabe resaltar que el barrio de Cankaya, donde sucedió el atentado, aloja a gran parte de los ministerios, embajadas y cuarteles generales del país. Es más, el ataque tuvo lugar a solo 300 metros de las sedes del Parlamento y las principales dependencias del estamento castrense como el Estado Mayor del Ejército, la Fuerza Aérea, la Marina o la Guardia Costera. 

Al momento, la policía y más de veinte ambulancias se encuentran en el lugar de la detonación, donde los agentes de seguridad impedían el paso de la prensa. 

(Con información de elmundo.es)

(Foto de cabecera: EFE)