En el distrito de San Juan de Lurigancho, la candidata presidencial de Fuerza Popular (FP), Keiko Fujimori, presentó a su equipo de lucha contra la inseguridad ciudadana, conformado por Marco Miyashiro, Octavio Salazar y Dardo López, con la promesa de "mano dura" contra la delincuencia.
Miyashiro fue integrante del Grupo Especial de Inteligencia (GEIN) que logró capturar al líder terrorista de Sendero Luminoso, Abimael Guzmán. En su presentación, dijo que Fujimori lo convocó hace meses para diseñar un plan de lucha contra la inseguridad ciudadana. "Ya tenemos un plan de gobierno, el compromiso de Keiko es ofrecer un gobierno con seguridad", afirmó.
Salazar fue ministro del interior durante el último gobierno aprista de Alan García. "Vamos a tomar las calles, al crimen hay que combatirlo en todos lados, desde donde se genera. Hay que generar todo un tejido social que nos permita que la propia ciudadanía tenga sus mecanismos de defensa a través de las juntas vecinales, con el pueblo organizado", dijo.
López, por su parte, es consultor policial. Resaltó que "sin seguridad, no hay nada". "Todo esfuerzo corre peligro de truncarse, la seguridad de los ciudadanos honestos es el primer punto para garantizar la democracia. Estamos hartos de que el gobierno se haga el loco", señaló.
Fujimori dijo que, de llegar al gobierno iba a utilizar a las Fuerzas Armadas "para cuidar y resguardar las instituciones públicas, como los alrededores de los penales y que la Marina de Guerra resguarde el puerto del Callao". Además, señaló, se van a establecer alianzas y convenios para que las municipalidades capaciten a los serenos para que dirijan el tránsito y así liberar a miles de policías para patrullar las calles.
"Si es necesario declarar en estado de emergencia un distrito para que intervengan las Fuerzas Armadas, lo haré. No me temblarán las manos contra la delincuencia", dijo.
Tanto la candidata presidencial como los miembros de su equipo no dejaron de recordar lo que hizo el encarcelado expresidente. Sin embargo, no dicen que esto es un mito fujimorista, ya que Alberto Fujimori no tuvo responsabilidad directa en la caída del líder senderista.
Ese fue un trabajo que se hizo independientemente de las acciones que emprendía el Ejecutivo. Mientras los policías hacían trabajo de inteligencia, las Fuerzas Armadas dirigidas por Fujimori, emprendían la estrategia de guerra sucia y cometieron graves violaciones a los derechos humanos, como en los casos Barrios Altos y La Cantuta cometidos por el Grupo Colina, crímenes por los que actualmente esta purgando pena.
El mismo 12 de setiembre de 1992, Fujimori estaba pescando en la selva y, como han dicho los miembros del GEIN, tampoco lo sabía Montesinos. Sobre Miyashiro, debemos recordar que él no recibió la recompensa que Fujimori entregó a quienes capturaron a Guzmán, porque él habría sido quien llevó el video en el que aparece el líder terrorista como muestra del trabajo de inteligencia policial. A pesar de ello, ahora acompaña a Keiko.
(Foto de portada: La República)
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