En medio de la crisis migratoria que azota a Cuba dado que unos 4.000 ciudadanos de la isla se encuentran varados en Centroamérica pues pugnan por ingresar a los Estados Unidos, una nueva medida anunciada por el Gobierno establece que todos aquellos médicos que quieran salir del territorio cubano deberán pedir un permiso previo a partir del 7 de este mes.
Es así que el régimen de Raúl Castro, a pesar de otorgar beneficios a los profesionales de la salud, muy reconocidos en el mundo, también limita drásticamente sus libertades.
Y es que solo en octubre de este año, se tomó la decisión histórica de otorgar una amnistía a los médicos desertores en los Estados Unidos. De esta manera, Castro garantizó un retorno sin represalias y con trabajo fijo al personal médico que había abandonado la isla dentro del contexto del deshielo de las relaciones diplomáticas entre ambos países.
Sin embargo y para evitar la fuga de varios renombrados médicos, la actual imposición los obliga a pasar por el Ministerio de Salud para tramitar la autorización respectiva en el caso de que quieran viajar por motivos personales. No se sabe precisamente cuánto tiempo tendrán que esperar por la respuesta.
A pesar del carácter obligatorio de la medida, el comunicado emitido a través del diario Granma afirma que la disposición no implica la prohibición de los viajes:
"Se analizarán las fechas de salida del país, teniendo en cuenta el relevo de cada profesional para garantizar la calidad, continuidad y estabilidad del funcionamiento de los servicios de salud".
Asimismo indica que servirá para 'mitigar las afectaciones' producto de la 'política migratoria selectiva y politizada de los Estos Unidos hacia la isla' y hará frente a la 'creciente contratación no planificada de médicos cubanos en distintos países'.
Médicos cubanos en el exterior
'Solidaridad Sin Fronteras' una organización cubano-estadounidense que busca ayudar a los ciudadanos fuera de la isla, calcula que unos 5.000 médicos cubanos han renunciado a sus trabajos en misiones internacionales en varios países como Venezuela, para trasladarse ilegalmente hacia Centroamérica y México en su intento por llegar a los Estados Unidos.
Cabe resaltar que Cuba recibe a cambio de los servicios que los profesionales prestan en el país de Maduro, unos 100.000 barriles diarios de petróleo.
Es en vista de ello que hacen uso de la Ley de Ajuste Cubano, más conocida como 'de pies secos', normativa que les permite obtener su residencia a todos aquellos que logran pisar el territorio estadounidense antes de ser detenidos por las autoridades en el mar.
¿El fin de las restricciones? No...
En el 2013 el Gobierno de Castro permitió que tanto los médicos como los demás ciudadanos pudieran salir del país por motivos personales, después de eliminar la mayoría de trabas migratorias que durante cincuenta años limitaron la libertad de movimiento.
A partir de ese momento más de medio millón de cubanos viajaron a otros países por asuntos particulares. Este hecho representó un crecimiento del 81% en relación al periodo 2010-2012.
Sus principales destinos eran Estados Unidos, México, Panamá, España y Ecuador. Este último país ha vuelto a instaurar el requerimiento de visado para los ciudadanos cubanos el pasado martes.
Antes de la nueva medida ecuatoriana, los cubanos tenían tres meses de visa libre los cuales podían emplear para preparar su viaje por tierra hacia el norte del hemisferio. Para ello tenían que atravesar nada menos que ocho puntos fronterizos.
Sin embargo, un súbito aumento del flujo de inmigrantes el pasado noviembre, hizo que Nicaragua cerrara su frontera sureña con Costa Rica, lugar donde a la fecha unos 4.000 cubanos esperan aprisionados una oportunidad para emprender nuevamente su viaje hacia el sueño americano.
(Foto de cabecera: cubanet.org)
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