Después de que en la década de los cincuenta la revolución sexual se instaurara como un tipo de liberación del propio cuerpo y de la sexualidad y originara distintas teorías acerca de lo biológico, la orientación y el comportamiento, muchos nuevos avances se muestran hasta la fecha como muestra de aceptación y respeto a la diversidad.

Es así que Francia ha dado un paso adelante en esta materia registrando a una persona, considerada hombre desde su nacimiento pero que nació sin genitales masculinos claramente definidos, con un sexo neutro en los documentos oficiales. 

Y es que el demandante, quien permanece anónimo, habría conseguido el pasado 20 de agosto que el Tribunal de Gran Instancia de Tours, ciudad situada al norte del país, que se modificara su acta de nacimiento. 

Al respecto, el magistrado que le otorgó la orden señaló:

"El sexo que se le asignó aparece como una pura ficción (...) impuesta durante toda su vida. No se trata de reconocer la existencia de un 'tercer sexo', sino de constatar la imposibilidad de encasillar al interesado en tal o cual sexo".

Según el médico de la persona en cuestión quien ahora tiene 64 años, está casada y tiene un hijo adoptado, nació con una vagina rudimentaria, es decir 'un micropene' sin testículos. 

De igual manera el afectado dijo al diario "20 minutes" que recién fue consciente de sus diferencias durante su adolescencia: 

"Me di cuenta de que no era un chico. No tenía barba, mis músculos no se desarrollaban. Al mismo tiempo, me resultaba imposible creer que me iba a convertir en una mujer. Me bastaba mirarme en el espejo para saberlo".

Antecedentes

Francia no es el único país que ha reconocido oficialmente el tercer género que no encasilla a la persona como hombre o mujer únicamente.

Alemania, en el 2013, se convirtió en el primer país europeo en permitir a los padres dejar de registrar el género de su bebé si este posee características de ambos sexos. 

Es así que actualmente los progenitores pueden dejar de marcar el espacio de 'sexo' en los certificados de nacimiento teniendo la alternativa de escoger una nueva categoría llamada 'sexo indeterminado'. 

Dicha decisión fue tomada para restar presión a los padres que deben elegir de manera apresurada el género de su bebé inmediatamente después de nacer. Asimismo la nueva ley da la posibilidad de que más adelante, cuando los niños lleguen a una edad adulta, puedan escoger su género u optar por quedarse bajo la categoría de tercer género o indeterminado. 

De igual manera, en Australia, el año pasado las leyes de Nueva Gales del Sur permitieron que una persona se registre en su documento de identidad con un 'sexo no definido'. Es así que la decisión judicial indicaba:

"La ley reconoce que un persona puede no ser ni hombre ni mujer y por eso permite el registro del sexo de una persona como 'no definido'".

De esta manera, Norrie, el demandante que nació hombre, se operó para convertirse en mujer y pidió en el 2010 que los registro lo inscribieran con un sexo no especificado, logró su cometido.

Sin embargo, la cuestiones oficiales no restan importancia a los factores culturales que han instaurado nuevas poblaciones con este tipo de género. 

Por ejemplo en India, Pakistán y Bangladés, las hijras, una comunidad del tipo 'tercer sexo' son la población mas conocida y numerosa de esta categorización en el mundo contemporáneo. 

Al respecto, la organización de la salud 'The Humsafar Trust' estima que hay entre 5 y 6 millones de hijras en la India. 

Dichas personas, muchas veces confundidas con transgéneros, nacen como individuos intersexuados o aparentemente masculinos, pero visten ropas femeninas y no son considerados ni hombres ni mujeres. 

(Foto de cabecera: noticiasmvs.com)