Una y otra vez los apus de la Federación de Comunidades Nativas del Corrientes (Feconaco) y de la Federación Indígena Quechua del Pastaza (Fediquep), que representan a miles de nativos de las cuencas loretanas que habitan la zona de influencia del Lote 192, han mostrado disposición al diálogo con el Estado y han actuado de buena fe en el proceso de diálogo de consulta previa para la licitación del yacimiento, aunque –como ya sabemos– el gobierno lo dio por finalizado de manera unilateral. Esa actitud, que se sumó a postergaciones para el inicio del diálogo, entre otros aspectos mal llevados, indignó a los líderes nativos pero éstos nunca pensaron 'patear el tablero'.
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Cada vez que LaMula.pe conversó con ellos insistían en la necesidad de reiniciar el diálogo con las autoridades, incluso enviaron cartas al presidente Ollanta Humala. Pidieron un nuevo diálogo, pero que no fuera uno de sordos, sino uno que sea respetuoso, intercultural y, sobre todo, que sea el inicio del cumplimiento de las demandas que el Estado aún no ha avanzado o lo ha hecho de manera muy incipiente o aún lejana de los requerimientos nativos.
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Además, fue un diálogo que no sólo fue requerido por los nativos sino también por instituciones como la Defensoría del Pueblo, la Coordinadora de Derechos Humanos, la Asociación Interétnica de Desarrollo de la Selva Peruana (Aidesep), la Organización Regional de Pueblos Indígenas del Oriente (ORPIO), entre otras.
No obstante que se les cerró el diálogo, aun cuando algunas autoridades salían ante los medios de comunicación a decir que estaban llanos a seguir reuniéndose con los nativos, los apus volvieron a Lima a inicios de setiembre para citarse con la ministra Rosa María Ortiz y exigir explicaciones sobre la licitación, el cese unilateral de la consulta previa y estado del avance del cumplimiento de sus demandas. Fue un encuentro nada más que informativo, regresaron a sus pueblos con las manos vacías.
Pues bien, ante la indiferencia del gobierno, los pueblos achuar del río Corrientes y los achuar y quechua del río Pastaza, representados por Feconaco y Fediquep, han iniciado hoy una movilización pacífica permanente. El primer paso –como ya se informó en este portal– ha sido la toma del aeropuerto de Andoas y un paro en ese distrito. Asimismo, se ha tomado la base petrolera de Pacific Stratus Energy y la de Petroperú. Con estas últimas medidas, se supone que el bombeo de petróleo quedará paralizado en cualquier momento.
Los nativos han invitado a los trabajadores a retirarse, de manera pacífica, sin enfrentamientos. La protesta no es contra ellos. LaMula.pe pudo saber que mañana se sumarán a la protesta en Andoas más pobladores de las comunidades de la parte baja del rio Pastaza.
¿Qué decidieron en la asamblea de las federaciones? Aquí los principales puntos del decreto acordado por las comunidades:
* No podrán circular embarcaciones, carros, aviones y/o helicópteros por nuestro territorio.
* La estación de bombeo de hidrocarburos de Petroperú debe paralizar.
* La empresa operadora del Lote 192 debe cerrar sus instalaciones dentro de nuestro territorio.
* Las personas que no pertenecen a nuestro pueblo y que han venido traicionando nuestros derechos deben retirarse de nuestro territorio.
* Los comerciantes podrán seguir vendiendo alimentos y artículos de necesidad, pero no se podrá vender licor hasta concluir el paro.
* Ninguna persona de las comunidades realizará actos vandálicos contra las instalaciones petroleras ni contra otras infraestructuras y materiales
* No deben ingresar a nuestras comunidades nativas, ni a nuestros territorios tradicionales, personal de la Policía ni del Ejército, porque atentarían contra nuestro derecho constitucional a la autonomía y a nuestros derechos consuetudinarios.
* Todo acto que vaya en contra de este decreto será tomado por nuestros pueblos como acto de provocación y nos veremos en la necesidad de actuar de acuerdo a nuestras normas y costumbres.
Esperemos que el gobierno encare este conflicto con diálogo y no actúe con violencia, sería perjudicial. Los nativos de estas comunidades están a la espera de que sus demandas –que las conoce el gobierno muy bien desde hace meses– sean cumplidas y que nuevamente no se entreguen contrapropuestas definitivas y sin discusión alguna. Los apus han reiterado a LaMula.pe que su protesta es pacífica. Cabe destacar el papel de estos líderes por buscar la cordura y el diálogo, no obstante que muchos de los nativos a quienes representan se han sentido burlados y no creen en el gobierno ni en el Estado y consideran que ningún contrato petrolífero les ha asegurado el control ambiental de sus territorios, y mucho menos la remediación ambiental, entre otros aspectos. No es fácil para los apus contener la indignación de miles de peruanos, pero lo están logrando. El gobierno debe hacer su parte.
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Al cierre de esta nota, el apu Aurelio Chino, de Fediquep, encabeza las acciones y la Policía ha optado por retirarse de momento, aunque, como se sabe, en las inmediaciones de las bases petroleras hay contingentes de la Dinoes. El lunes las federaciones darán conferencia de prensa en Iquitos.
(Fotos: Feconaco)
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