El día de ayer, la Comisión de Justicia del Congreso archivó el proyecto de ley que buscaba legalizar el aborto en casos de violación sexual. Uno de los más entusiastas con esta decisión fue el presidente de dicho grupo de trabajo, Juan Carlos Eguren, quien dijo que su posición es favor de la vida (no de las mujeres, ciertamente).
Para mala suerte del parlamentario pepecista, este tema aún no está cerrado. Y es muy probable que la despenalización del aborto en casos de violación sexual sea un tópico importante en la próxima campaña electoral.
Así lo demuestra una encuesta realizada por Ipsos-Perú (publicada en El Comercio) en la cual se expone que la penalización de la interrupción del embarazo no goza de un apoyo mayoritario (no en todos los casos, al menos).
Según el sondeo, un 41% de los encuestados cree que el aborto debe ser ilegal en la mayoría de casos. Un 25% considera que debe ser ilegal en cualquier circunstancia.
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No obstante, cuando se indaga en las diferentes situaciones que rodean a la interrupción de embarazo, los porcentajes revelan datos importantes. Por ejemplo, un 67% aprueba el aborto cuando está en peligro la vida de la mujer.
¿Y en el caso de violación sexual? La aprobación asciende a 52% (atención, congresista Eguren). En tanto un 50% está a favor de la interrupción del embarazo en caso de que el 'niño' (debería decir feto) presente graves deficiencias.
El dato más interesante se refiere a la consideración del aborto: 31% cree que no es un tema moral (contra un 49%).
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Aunque estas cifras solo abarcan la ciudad de Lima, resulta significativo ver como un sector de la ciudadanía empieza a ver este tema desde varias perspectivas ya no solo desde la religiosa. Esperaremos los resultados a nivel nacional.
REACCIONES
Para María Elena Reyes, directora de la ONG Manuela Ramos, el apoyo que recibe el aborto en casos de violación sexual se debe al alto número de violaciones. Entre enero y noviembre del 2014 se reportaron 1.428 denuncias de violaciones en los Centros de Emergencia Mujer. Un gran número de las víctimas son menores de edad.
Rossina Guerrero, directora de Promsex, recuerda que la mayoría de estos abusos sexuales (a mujeres menores de 18 años) fueron realizados por parientes de las víctimas. El aborto para estos casos -señala- disminuye, de alguna forma, el grave daño mental e irreparable que produce este delito.
