¿Alguien cree que el fujimorismo es una opción democrática para el Perú? ¿Keiko Fujimori representa algo diferente que su padre, el exdictador actuamente preso por corrupción y violación de derechos humanos?
Julio Cotler te dice las cosas claras. Keiko solo es un regreso a los noventa, representa lo mismo que su padre, Alberto Fujimori, afirma el antropólogo e investigador principal del Instituto de Estudios Peruanos (IEP).
En entrevista al programa No Hay Derecho de Ideeleradio, Julio Cotler opinó sobre los temas de coyuntura. Sobre Keiko Fujimori y el fujimorismo dijo:
"Fujimori no es un recuerdo, es el presente. Keiko no es lo que pasó hace 25 años. Ella tiene una vocación autoritaria y tecnocrática. No hay un nuevo fujimorismo. Todo el grupo fujimorista quiere reivindicar el gobierno de los noventa, liberar a Alberto Fujimori y borrar del mapa a toda la oposición democrática".
¿Y que estaría pasando en estos momentos si Keiko fuera presidenta? Cotler responde:
"Keiko Fujimori podría tener un gobierno aferrado entre empresarios y políticos, ahí no habrían conflictos por Conga o Tía María, ahí ella mandaría a la policía para poner orden y punto. Y de repente eso tendría un apoyo de una mayoría de la opinión pública. Un sector de la ciudadanía prefiere la eficacia a la democracia".
Compartimos también las declaraciones de Cotler sobre los diferentes temas de la coyuntura política peruana:
Sobre Ollanta Humala y los tecnócratas:
"Se ha aislado de cualquier fuerza política creyendo que el comandante manda y los demás le van a obedecer. Se ha quedado aislado mientras el piloto económico sigue funcionando. Lo importante es que se ha abierto un debate sobre la debilidad institucional del Estado. Esta debilidad responde al carácter tecnocrático del Estado, que no toma en cuenta los intereses de la sociedad. No hay control sobre lo que hacen los tecnócratas. La movilización ciudadana es cada vez mayor. La única explicación que encuentran los tecnócratas a los conflictos es la falta de comunicación".
¿Qué es un tecnócrata?
"Un tecnócrata por definición es antipolítico. Es la politiquería, es lo que interfire. Una de las condiciones de las reformas neoliberales es el aislamiento de los tecnocrata de las presiones sociales, supuestamente. En los noventas no supieron o no quisieron saber del Grupo Colina, de los asesinatos, la violación a los derechos humanos, ni de la corrupción, estaban en su isla de eficiencia".
Humala, el aislado:
"Si alguien quiere hacer una reforma, tiene que pensar en sus aliados y en sus enemigos, y en qué jugadas se van a hacer cuando los enemigos pretendan oponerse. La política es como un juego de ajedrez, siempre hay que anticiparse. Pero, aquí no había juego de ajedrez, solo habían órdenes y decretos. No habían aliados, se aisló mientras que los opositores se unieron".
La política vs. la tecnocracia:
"Él tenía una bancada importante. Se habla de que nunca se reunió con la bancada, nunca tuvo elementos que hicieran de mediadores de la bancada y organizara la masa que votó por él. No había política, porque se supone que la política va en contra de las decisiones tecnocráticas. Si uno quiere que el neoliberalismo funcione hay que dejar de hacer política".
¿Cómo jugaba Alan García?
"Desde Toledo que no se hace política. Alan García nos hacía creer que hacía política pero en realidad solo la hacía con sus grupos de interés, que es el empresariado. Su interlocutor era el sector empresarial. García entendió que estamos en otra época y en otro momento, que las reglas de juego son diferentes".
¿Qué pasa con la oposición, los movimientos sociales y las izquierdas?
"En los últimos 15 años de gobierno, hemos tenido protestas, pero no una oposición orgánica. Este es el elemento clave para comprender la debilidad institucional del país. No hay izquierdas o están tan desperdigadas que no vale la pena tomarlas como un factor de oposición. La mayoría del Congreso apoya la línea de política económica que sigue el país. No hay ninguna oposición a determinados tipos de política, hay oposición a las figuras y a los antis. Lo que tenemos en el Perú son identidades políticas muy fuertes sin organizaciones fuertes. Hay antifujimorismo y antiaprismo, pero no se anclan en organizaciones políticos, son estados de ánimo. Se vota por el mal menor, por el cual se siente menos odio".
"Los movimientos son importantes porque cambian las agendas políticas, pero son insuficientes, no basta con que haya una protesta para que se traslade organizativamente a la política. La mayoría tiene una bandera anarquista, con las redes sociales, no hay jerarquías, no hay liderazgo, son anti-políticos. La historia de la política dice que uno tiene que pagar el precio de tener organización, agendas, estructuras burocráticas, jerarquías. Esto es inevitable y necesario".
"Creo que las izquierdas no tienen opción porque tienen una vocación a la división, la cual es permanente. Desde el momento en que no aceptan pluralismos, no tienen capacidad para hacer alianzas. No veo posibilidad de alianzas importantes. Podrían tenerla, pero no hay liderazgos, ni vocación de unidad, ni de plataforma. Peor si tenemos a izquierdistas que dicen que Maduro y Fernández son demócratas en Venezuela y Argentina"
Un futuro nada prometedor:
"En el 2016 se repetirá la historia entre Alan y Keiko. En el Perú todo es tan imprescindible que todo puede suceder. Pero actualmente no se ve a nadie que intervenga con fuerza para cambiar el escenario"
Sobre Pedro Cateriano, el nuevo Jefe del Gabinete:
"No sé cuál ha sido el criterio del Presidente para nombrar a Pedro Cateriano. Pero él es de una especie totalmente diferente a todos los demás primeros ministros que ha tenido. Es un político con buena formación profesional, con contacto. Vamos a ver si es capaz de cambiar para establecer diálogo con los líderes para sobrevivir hasta el final del régimen de Humala. Vamos a ver cuánto de lazos puede sostener por el lado de Fujimori y García".
Sobre un posible cierre del Congreso ante la probable censura al Jefe del Gabinete, Julio Cotler descartó esto considerando que el fujimorismo y el aprismo necesitan estabilidad:
"García necesita estabilidad política para ganar las próximas elecciones y Pedro Cateriano se lo ofrece. Keiko Fujimori debe pensar lo mismo. Si es que piensan políticamente, tienen que ver la manera de establecer relaciones positivas. Se necesita un tránsito de estabilidad política de aquí al 2016 y Cateriano lo puede ofrecer".
Por último, dijo las cosas claras respecto al alcalde de Lima:
"Castañeda Lossio es un dictador".
(Foto de portada: IEP)
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