Apenas tres días después de un primer mensaje sobre la muerte del fiscal argentino Alberto Nisman, quien la denunció por encubrimiento de terroristas (caso de la AMIA) cuatro días antes de fallecer con una bala incrustada en la cabeza, la presidenta argentina cambia de versión tras haber leído la denuncia íntegra del fiscal (publicada en Internet).

En su primera carta publicada a través de su cuenta de Facebook, la presidenta argentina sostenía que Nisman se había suicidado, e incluso se preguntaba "¿Qué fue lo que llevó a una persona a tomar la terrible decisión de quitarse la vida?". En el mismo mensaje hizo un recuento de la investigación judicial del atentado ocurrido en la Asociación Mutual israelita Argentina (AMIA).

Ahora, en un nuevo mensaje, Fernández declara que está convencida de lo contrario: que el fiscal Nisman no se suicidó. 

En el texto, titulado "Los espías que no eran espías. Los interrogantes que se convierten en certeza. El suicidio (que estoy convencida) no fue suicidio", también señala que la denuncia de Nisman no aporta nada nuevo. Asimismo, afirma que al fiscal argentino le "plantaron información falsa en su informe"  y que la verdadera  operación contra el gobierno "era la muerte del Fiscal después de acusar a la Presidenta, a su Canciller y al Secretario General de La Cámpora de ser encubridores de los iraníes acusados por el atentado de la AMIA".

Para sustentar su postura, la presidenta hace mención a algunos análisis periodísticos como el publicado por Horacio Verbitsky en el diario Página 12.

El atentado a la AMIA

El 18 de julio de 1994 , la AMIA fue víctima de un atentado terrorista que dejó un saldo de 85 muertos y 300 heridos. Luego de una exhaustiva investigación,  la fiscalía argentina acusó formalmente, en el 2006, al gobierno iraní de planificar el atentado y al grupo Hezbollah de ejecutarlo.

El 18 de enero de este año, el fiscal Nisman denunció a la presidenta Cristina Fernández y al canciller Héctor Timerman por una presunta negociación para encubrir a los iraníes prófugos acusados del atentado.