Post: Corteo, un sueño que invoca a la imaginación

Cirque du Soleil cuida todos los detalles. Quien entra a sus carpas experimenta sensaciones distintas. Los colores; la música; las bombillas tenues, que contribuyen al suspenso, a mantener la expectativa ante lo que se viene, y que a la vez nos remiten a las que luces que iluminaban los exteriores de los circos de antaño. Sabemos que es un espectáculo majestuoso. No importa si uno ha visto las decenas de DVD que hay en el mercado. No es lo mismo, en absoluto. Cada acto sorprende, uno tras otro.

Pero lo que más llama la atención en la escenografía de Coreo es el hermoso telón. El telón –dividido en dos partes– que apenas cubre el escenario es el inicio de un viaje a otra dimensión, a otra época. No son cualquier telón ni escenario. El primero muestra una pintura inspirada en el famoso panel Parce Domine (Perdona, Señor), que Adolphe Willette creó en 1885 para el cabaret Le Chat Noir. El segundo es de 360 grados, gira en muchos momentos del espectáculo y divide a las graderías en dos partes iguales. Todos los asistentes vemos todo el escenario, sea cual fuere nuestra ubicación.

La intensidad de las luces disminuye, oigo risas. Veo hacia el otro lado del escenario y hay movimiento. Volteo hacia atrás y me doy cuenta del porqué: algunos personajes hacen dinámicas lúdicas entre el público. Vuelvo a mirar hacia el escenario y por fuera del telón –a 1 metro de distancia– hay artistas haciendo lo suyo, como si fueran parte de nosotros. De pronto, todo silencio, luces apagadas. Una marcha fúnebre suena mientras se levanta el telón, revelando la escenografía de inspiración italiana. En una cama yace el personaje principal, Mauro, un payaso que mira su propio funeral, sin la claridad de lo que es fantasía y lo que es realidad. Se encienden bombillas y candelabros. Es entonces cuando surge la figura –y el látigo– del famoso Sean Lomax, el silbador fiel, para dar el saludo del circo a la ciudad de Lima. Una vez ello, empieza toda la magia del Cirque du Soleil.

Corteo es una ambientación con numerosas influencias visuales, especialmente del estilo barroco y también símbolos religiosos que el suizo Daniele Finzi Pasca, su creador, hilvanó cuidadosamente. Mauro imagina su propio funeral que se celebra en un ambiente de carnaval, vigilado por unos ángeles que le cuidan en silencio. Mediante la yuxtaposición de lo grande con lo pequeño, lo ridículo con lo trágico y la magia de la perfección con el encanto de la imperfección, el espectáculo pone de manifiesto la fuerza y la fragilidad del payaso, así como su sabiduría y su bondad, para ilustrar la porción de humanidad que se encuentra dentro de cada uno de nosotros. La música, lírica y jovial por momentos, transporta Corteo a través de una celebración eterna en la que la ilusión se burla de la realidad.

Si en el 2012 nos deleitó con Varekai, el Cirque du Soleil hace lo mismo ahora con Corteo. Y es que es un espectáculo distinto. Más dramático, y más latino, pues la historia procede de una cultura familiar a la nuestra: Italia. Un mundo onírico puesto en escena para ser visto con ojos de niño.

UN SHOW DISTINTO

"Este es el espectáculo más teatral de la compañía: hay un guión, se habla en español y en italiano", me dice Bruce Mather, director artístico del espectáculo que fue creado en el 2005 bajo la dirección de Daniele Finzi Pasca. "'Corteo' presenta las memorias de un payaso que asiste a su propio funeral, es un hombre que recuerda la vida del circo, los buenos momentos, los amores, la juventud, la niñez. Las cosas que nos marcan”, añade.

Corteo rompe con el modelo del circo al llevarnos a un lugar específico, Italia, en una época específica. Pero también va contra la idea que se tiene de un payaso. “Para nosotros, un payaso no es el típico señor con la nariz roja que se cae y todos se ríen. El payaso es una persona cualquiera que tiene un punto de vista diferente a los demás. Tienen un ángulo poético para entender la vida. Y nos enseña el absurdo, lo bueno y lo malo, lo ridículo y lo complicado. Es un don para compartir con los demás”, detalla Bruce, canadiense que de joven fue bailarín y muy ligado al circo.

Los sueños no tienen lógica, y en Corteo hay mucho. “Por eso en esta obra hay mujeres que vuelan en candelabros que se mueven como si bailaran, camas saltarinas, caballos que actúan como personas, una lluvia de pollos de hule...”, resalta.

Y aunque el espectáculo evoluciona, su base no. “Intentamos siempre mantenernos fieles a la visión creativa del director-creador de la obra, pero pasa también con la llegada de un artista nuevo que viene con un talento diferente, e intentamos incorporar esas características a la presentación. Así que en la base es el mismo espectáculo, pero con una buena y linda evolución”, me cuenta Patrick Flynn, director general de 'Corteo'.

Le comento que en el Perú hay muchos funerales con ritos, como parte de una tradición precolonial, en los que se concibe a la muerte como un paso más de nuestras vidas. “Efectivamente, es una similitud entre los latinos, por eso esta historia italiana funciona muy bien en esta región, no tenemos que 'adaptarla'. Aquí es un público distinto al de Japón, por ejemplo, donde hemos tenido que hacer algunos ajustes. De hecho, cuando se seleccionó a Lima para esta gira, sabíamos que el público se sentiría cercano al espectáculo, a la historia”, explica el irlandés en un perfecto castellano.

Corteo tiene números inéditos que no se han visto en ninguna otra presentación del Cirque du Soleil. Por ejemplo, el número ‘Paradise’. “Es un trapecio humano –dice Patrick Flynn –. En lugar de utilizar un trapecio son unos hombres que lanzan a las trapecistas de un lado a otro. Es un arte de circo que estaba casi muerto y que con la aparición en ‘Corteo’ volvió a ser un arte vivo en el mundo del circo”.

“Cuando creamos una obra siempre intentamos que sea muy accesible al público, al nivel de los temas, de los mensajes. Cada da espectador vive una experiencia propia”, me dice con mucha ilusión.

“Corteo es un show único, tenemos tantas cosas diferentes de otros shows. Si te das cuenta, en algunos espectáculos los artistas usan un maquillaje fuerte pero una vez que vienes y ves Corteo, no tenemos un maquillaje fuerte, es un maquillaje muy natural. Cada artista tiene que armar su propio personaje. En el show ellos usan su propio nombre. También tenemos una atmósfera muy íntima, un escenario que toda la audiencia puede lograr ver y dos entradas para los artistas”, así define la singularidad de 'Corteo' Mami Ohki, publicista japonesa que se encarga de coordinar toda la prensa de Corteo. Amable pero súper disciplinada, ella dice qué pueden hacer los periodistas y qué no.

gestión de talento

Cientocuarenta personas entre técnicos y artistas dan vida a 'Corteo'. Los 60 intérpretes que se mueven sobre el escenario crean 19 actos durante casi dos horas de show.

“La vocación es muy importante”, resalta Patrick Flynn. Y agrega: “La vocación es involuntaria, está dentro de nosotros. Viajar con el circo es elegir seguir esa vocación. Queremos estar aquí, nadie está por accidente. No siempre coinciden vocación y talento, siempre buscamos gente que tenga esas dos características. Queremos crear oportunidades y enriquecer la vida de quienes trabajan con nosotros, pero también debemos hacer un trabajo, entonces la gestión de talento, el desarrollo de talento y la falta de talento son importantes para lo que hacemos. El Circo du Soleil trabaja con la excelencia y pedimos eso a quienes trabajan con nosotros. La vocación debe ser complementada con el talento y el próximo paso es el trabajo. Querer hacerlo (vocación), saber hacerlo (talento) y hacerlo (trabajo)”.

“Los artistas dan en el escenario todo lo que tienen. Su pan de cada día es el aplauso del público, pero ellos también necesitan saber más, necesitan saber que ‘esto podría mejorar’ o ‘esto así no, mejor así’ y ‘¡genial!’, es muy importante oír esto de alguien de confianza”, dice Bruce.

“Aquí pedimos hasta 60 horas semanales de trabajo por respeto al público, dependemos del publico que vienen a ver el espectáculo, de la venta de entradas, del éxito de la empresa. Hacer un espectáculo es involucrar mucho tiempo, comprometerse a los estándares de la excelencia. Nosotros presentamos una obra de arte en cada función”, señala Patrick.

“Los artistas del Cirque du Soleil deben tener habilidad en su acto, al mismo tiempo tienen que expresar emociones y motivación para conectar con la audiencia. Corteo es un show que siempre está en tour así que la persona debe acomodarse a estos viajes. Tenemos otros pequeños aspectos a evaluar pero sí, eso es lo que necesitamos de nuestros artistas”, anota Mami.

El Cirque du Soleil tiene programas de incentivo a la cultura. Los directores piden a los artistas que vayan a museos, teatros y otros espectáculos. "Siempre pedimos a los artistas buscar expresiones artísticas un poco fuera de las normas, para que no sólo se inspiren en nuestro circo [de hecho en esta oportunidad han visitado no sólo medios de comunicación sino también diversos espacios públicos]. Y Corteo muestra muy bien que el circo tiene la capacidad de inspirarse desde fuera, es un espectáculo con muchísimas influencias externas, en su estética, en su puesta en escena”, explica Patrick.

EL CIRCO SEGÚN EL CIRQUE

“El circo, como cualquier otra cosa en el mundo, siempre está evolucionando. Si algo se apalanca, se pone aburrido, se pierde la visión. Cirque du Soleil ha tomado una dirección. Hemos cogido cosas de ahí de allá y hemos hecho nuestra armonía. Cirque du Soleil hace una revolución de coger formas de arte y juntarles de una manera vanguardista… Nunca paramos, siempre hay una forma de hacerlo mejor, siempre”, dice Bruce

“Para mí esto es un circo, pero hemos hecho algo diferente, no tenemos animales, tenemos algo único. Como estamos en un tour, intercambiamos culturas, es una experiencia única para nosotros y para las otras personas. En cada ciudad y país tengo una experiencia diferente, eso es algo muy gratificante para mí pues tenemos materiales y un show genial. Estoy contenta de decir eso, pues pasas un momento genial, puedes olvidarte de todo durante una hora y media. Espero que esto les muestre a las personas que ellos también pueden alcanzar sus sueños, pues la mayoría de los artistas soñaban serlo y lo hicieron, alcanzaron ese sueño”, explica Mami

“El Cirque du Soleil es mi vida. Cuando el circo llegó a Berlín y me invitaron a una audición, yo no lo podía creer, cambió mi forma de ser totalmente. Vivo feliz en el circo, además me gusta conocer otros países, otras culturas. Mi vida es disciplinada, no solamente para hacer mis actos con excelencia, sino también para tener una vida sana, disipada. El circo y el Cirque du Soleil en particular marcan mi existencia”, dice Patrick Schumann, artista alemán que participa en tres actos.