Con la finalidad de prevenir casos como el del joven Gerson Falla, quien murió tras ser torturado en la comisaría de San Borja (Lima) y cumpliendo con compromisos internacional por la defensa de los derechos humanos, el Congreso de la República aprobó ayer el proyecto de ley que amplía las funciones de la Defensoría del Pueblo para la implementación del Mecanismo Nacional para la Prevención de la Tortura y otros Tratos o Penas Crueles, Inhumanos y Degradantes (MNP). 

El objetivo es prevenir estos delitos en lugares de privación de libertad, como penales y comisarías, centros de adolescentes infractores e instituciones psiquiátricas. 

Durante la sustentación del proyecto, los presidentes de las comisiones de Constitución, Omar Chehade, y de Justicia, Juan Carlos Eguren, enfatizaron los largos años que el Estado estuvo en falta con este compromiso internacional asumido en defensa de los derechos humanos. En 2006 el Congreso aprobó un protocolo facultativo para crear este Mecanismo, ocho años después finalmente se hace realidad.

Entre las funciones del MNP, que será independiente de los tres poderes del Estado, están el examinar periódicamente el trato a las personas privadas de libertad, hacer recomendaciones a las autoridades competentes para mejorar el trato y condiciones de estas personas, comunicar a las autoridades competentes sobre la existencia de delitos o irregularidades que requieran investigación, promover capacitación, información y sensibilización sobre la prevención de la tortura, entre otros. 

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