No se queda quieto. César Acuña está empecinado en llegar a la presidencia del país, pero parece haber entendido que debe escalar 'cargos' para llegar a las dos cifras en las encuestas con miras al 2016.

En una clara jugada política, Acuña presentó su renuncia a la alcaldía de Trujillo, donde ejercía su segundo mandato consecutivo- para postular en las elecciones de octubre al Gobierno Regional de La Libertad. El Concejo Municipal aprobó la dimisión esta mañana.

"Alianza para el Progreso no solo aspira a gobernar el Perú, también aspira a gobernar muchas regiones muchos gobiernos locales y con eso estamos hablando de un verdadero partido descentralista", sostuvo en declaraciones a la prensa.

Acuña al parecer está convencido en arrebatarle la la presidencia regional al partido aprista al igual que en 2006 lo hizo con la alcaldía trujillana, un golpe del que hasta ahora el partido de la estrella parece no recuperarse.

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