El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, volvió a mostrar su carácter impulsivo este jueves, luego de que el Departamento de Justicia de EEUU nombrara el miércoles al exdirector del FBI Robert Mueller como "fiscal especial" para supervisar la investigación de esa agencia sobre la injerencia de Rusia en las elecciones de 2016. 

Por medio de su cuenta de Twitter, Trump calificó esta decisión como "la mayor caza de brujas contra un político en la historia de América". En otro mensaje, recalcó que ni los "actos ilegales de Clinton u Obama" merecieron el nombramiento de un fiscal especial. Un día antes, Trump se posicionó como víctima declarando que "ningún político ha sido nunca tratado peor".

La reacción de Trump es además una muestra clara de la incomprensión que tiene sobre la autonomía de poderes en una democracia y la inconformidad que le causa  la investigación por la posible injerencia de Rusia en el proceso electoral y las supuestas coordinaciones con su equipo de campaña.

El vicefiscal general del FBI, Rod Rosenstein, anunció el nombramiento de Mueller para supervisar la pesquisa en un comunicado. "Mi decisión no es un hallazgo de que se han cometido delitos o de que una acusación está confirmada. No he llegado a semejante determinación", explicó.

Además insistió en que "un fiscal especial es necesario para que el pueblo estadounidense tenga una confianza completa en el resultado" de la investigación. "Lo que he decidido —precisó— es que, en base a circunstancias únicas, el interés público requiere que ponga esta investigación bajo la autoridad de una persona que ejerza una cierta independencia de la cadena normal de mando", añadió el vicefiscal general del FBI.

Asimismo, Ronsenstein le da el voto de confianza a Mueller en el liderazgo de la investigación. "El fiscal especial Mueller tendrá todos los recursos apropiados para dirigir una investigación exhaustiva y completa, y estoy seguro de que él seguirá los hechos, aplicará la ley y alcanzará un resultado justo", declaró.

La oposición demócrata lleva semanas pidiendo el nombramiento de un fiscal especial independiente para investigar los posibles vínculos entre la campaña de Trump y Rusia, pero la mayoría de los republicanos se habían mostrado hasta ahora contrarios a esa idea.

¿Quién es Robert Mueller?

Mueller dirigió el FBI durante doce años bajo las presidencias del republicano George W. Bush y el demócrata Barack Obama, hasta su retiro en 2013, siendo sucedido por James Comey, quien fue destituído por el presidente Trump la semana pasada ocasionando una tormenta política en Washington.

"Durante 12 años Robert Mueller mantuvo al FBI fuera de la política", dijo  el exsubdirector de esta agencia, Thomas Pickard, al destacar las cualidades del nuevo investigador especial de la trama rusa, quien a decir de varios analistas en Washington,  podría, con su investigación, poner contra las cuerdas a Trump, si llegara a comprobarse que el mandatario intentó obstruir a la justicia.

Mueller es un veterano de la Guerra de Vietnam —por las que recibió sendas condecoraciones— y abogado de 72 años, nacido en Nueva York y criado en Filadelfia. Tiene gran reputación como profesional. "Ha sido una gran elección. Credenciales impecables", escribió en su cuenta de Twitter el senador republicano Jason Chaffetz.

Imagen de cabecera: EFE

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