La enorme trama de corrupción de Odebrecht, que ahora amenaza con tumbar presidentes o hacer caer gobiernos en toda la región, se instaló con fuerza en Colombia, país en el que esta empresa admitió haber pagado US$11 millones en sobornos y donde este miércoles se abrió oficialmente una investigación para determinar la supuesta entrada de dinero de la mayor constructora de América Latina en la campaña electoral de 2014.
La posibilidad de que este caso alcance al presidente Juan Manuel Santos ha desatado un tsunami político en el país. De momento, el escándalo apunta al entorno del mandatario colombiano, mientras que la fiscalía anunció que será el Consejo Nacional Electoral (CNE) la instancia encargada de las pesquisas, por tratarse de una investigación administrativa para determinar si las campañas de la pasada elección presidencial violaron las normas de financiación.
El titular del CNE, Alexander Vega, explicó que las indagaciones tendrán como objetivo demostrar dos cosas: i) "Si se omitió haber reportado un gasto de campaña" y ii) si se incumplió "la prohibición expresa de que un Gobierno, persona jurídica o natural del extranjero, haga aportes a campañas de índole nacional".
La Fiscalía informó el martes último que el exsenador del Partido Liberal Otto Bula, detenido a principio de año por los sobornos de Odebrecht, dijo en una declaración jurídica que de US$ 4,6 millones recibidos como coimas, un millón de dólares tenía como destino a Roberto Prieto, gerente de la campaña para la reelección de Santos en 2014.
Sin embargo, este martes, en una conferencia de prensa, el fiscal general, Néstor Humberto Martínez, dijo que "carecen de pruebas" sobre si el dinero efectivamente entró en la campaña de Santos, porque solo cuentan con la declaración de Bula.
Incluso el funcionario fue enfático al señalar que Bula "no vincula para nada" al mandatario sobre esa posible financiación ilegal a su campaña y hasta hizo un "reconocimiento" a Santos, ya que "al enterarse de la compulsa de copias ha manifestado su respeto por las decisiones de la Fiscalía General de la Nación".
El presidente colombiano solo se pronunció con un mensaje en Twitter en el que pidió una "investigación a fondo" para poder conocer "lo más rápido posible" la verdad sobre la supuesta llegada de dinero de Odebrecht a su campaña.
Quienes salieron en su defensa fueron los miembros de su gabinete, que cerraron filas alrededor del mandatario y calificaron la denuncia acerca de la recepción de dinero de Odebrecht como algo "absurdo e inaceptable", en un comunicado:
"El presidente Santos a lo largo de su vida pública y en los últimos seis años y medio de gobierno ha demostrado a los colombianos su condición de dirigente transparente e intachable en todas sus actuaciones. Con su liderazgo, el Estado se ha comprometido a fondo en la lucha contra la corrupción y su honestidad nunca se ha puesto en duda".
Hasta ahora, las investigaciones en Colombia se habían centrado en los contratos millonarios obtenidos por Odebrecht para la construcción de la autopista Ruta del Sol II, que comunica al centro con el norte del país, proyecto aún no concluido, y en las obras para mejorar la navegabilidad del río Magdalena, el mayor del país. Pero las sospechas de corrupción también apuntan a un proyecto del Acueducto de Bogotá, en el cual se detectaron irregularidades.
Por los sobornos que Odebrecht pagó por adjudicarse la Ruta del Sol II están detenidos, además de Bula, el exviceministro de Transporte Gabriel García Morales, quien aceptó cargos por haber recibido US$6,5 millones.
Remezón en el uribismo
El caso de sobornos en Colombia también salpicó al candidato del partido uribista Centro Democrático en el 2014, Óscar Iván Zuluaga. De acuerdo a lo que reveló hace poco la revista Veja de Brasil, parte de los honorarios del publicista brasileño Duda Mendonça, que lo asesoró en la campaña, fueron pagados por Odebrecht, lo que también será investigado por el CNE.
Al respecto, el fiscal Martínez dijo que "la llamada es a permitir que el CNE pueda tomar una decisión en derecho y para eso contará con la cooperación de la Fiscalía, no solo por el presunto financiamiento de la campaña del presidente Santos, sino también para el caso del financiamiento (de Zuluaga)".
Martínez precisó que la fiscalía tiene "evidencias" con base en testimonios que indican que uno de los miembros de la campaña de Zuluaga era "el canal de comunicación" con Odebrecht.
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