Cuando en octubre de 2013 la Organización Deportiva Panamericana (Odepa) otorgó a Lima la sede de los XVIII Juegos Panamericanos, que se realizarán en 2019, nuestro país vivió una ola de regocijo por la oportunidad de poder organizar uno de los eventos deportivos más importantes del mundo después de los Juegos Olímpicos.
Sin embargo, a escasos tres años de la celebración de esta gran fiesta deportiva, nuestra realidad revela que no contamos con infraestructura suficiente o un plan estratégico capaz de convertir al Perú en un escenario de primer nivel que pueda llevar a cabo los Panamericanos a la misma altura de Toronto, ciudad que albergó el año pasado este evento y que ha sido catalogado como el mejor de la historia.
Para José Enrique Arispe Chávez, decano del Colegio de Arquitectos del Perú, esta es una preocupación que no es solo ahora sino de meses atrás, ya que no se vienen cumpliendo con las recomendaciones de Odepa, sobre todo en los temas de infraestructura, ya que a la fecha no hay un solo escenario deportivo que cumpla con los estándares internacionales.
En entrevista con RPP Noticias, Arispe Chávez señaló que el único escenario deportivo que cumplía de alguna manera con dichos parámetros era el Estadio Nacional pero que dejó de hacerlo cuando redujo de once a siete sus pistas atléticas.
"Entonces no tenemos un escenario deportivo adecuado y menos una Villa Olímpica. Los requisitos de Odepa nos dice que al menos tiene que haber cuatro escenarios similares al principal como escenarios de entrenamiento, cosa que no se ha hecho absolutamente nada hasta ahora, ni siquiera se ha identificado el espacio urbano donde se va a hacer".
Y es que a juicio del decano del Colegio de Arquitectos del Perú, las grandes obras nacionales -como los subterráneos, por ejemplo-, que debió ser un tema que vaya directamente relacionado con la organización de los Juegos Panamericanos de 2019, "no se van a cumplir en los plazos asignados".
"He conversado con los supervisores y no llegan al 2019. Entonces, ¿de qué hablamos? ¿Cómo se va a movilizar la gente? Y se sabe que van a venir entre 250 a 500 mil personas, entre participantes y público (...) Esto va a dinamizar la economía y su fracaso va a significar un castigo del organismo internacional como lo tuvo Chile hace algunos años y probablemente nos apliquen 15 años de no tener ninguna representación internacional".
La sanción a la que hace referencia Arispe Chávez serían las dos veces que Chile tuvo que renunciar al derecho de ser sede los Juegos Panamericanos (1975 y 1987) por diversos problemas económicos y políticos. Pero ello no ha impedido que el vecino país del sur pretenda volver a ser el anfitrión de esta fiesta deportiva, ya que habría intentado arrebatarle a Lima la organización de este evento para el 2019, según denunció en enero del año pasado el ahora exjefe del Comité Olímpico Peruano (COP) José Quiñones.
PIDE QUE INTERVENGA LA EMPRESA PRIVADA
En otro momento, el decano del Colegio de Arquitectos del Perú dijo que el presupuesto para la construcción de los escenarios deportivos y villas olímpicas necesarias para los Juegos Panamericanos 2019 oscila "entre los US$2000 y US$5000 millones", pero que dichas cifras solo "son estimados". Para alcanzar dicha inversión, señaló que es necesaria la participación del sector privado.
"Son obras que van a dinamizar la economía, va a generar grandes proyectos y puede generar la gran transformación que esperamos de Lima porque es un inductor para el desarrollo, no es simplemente cumplir con el tema deportivo, esto induce al desarrollo, induce inversiones y hace que active la actividad privada y que apueste por el Perú".
El arquitecto indicó que el Comité Olímpico Peruano le expresó su preocupación porque el Plan Maestro que elaboraron y presentaron hace 11 meses a los responsables de la realización de los Panamericanos 2019 (entre los que figuran el Instituto Peruano del Deporte (IPD) y el Ministerio de Educación) han desestimado su propuesta por motivos que se desconoce, ya que -según acusó- "no hay transparencia" en dicho proceso.
"Fue un estudio, que la elaboró gente muy técnica, de posibles escenarios y las inversiones que se necesitaban para adaptar, entre otros, diversos lugares como el Estadio de San Marcos, que es un buen escenario que solo necesita un poco de dinero para mejorarlo e implementar los temas de seguridad, pero (el documento) ha sido desestimado".
En el caso que se apruebe la intervención del sector privado, el decano del Colegio de Arquitectos del Perú señaló que se le debe proveer en algunos casos exoneraciones tributarias o facilidades de tributación para que se incentive su participación ante la falta de interés del Gobierno en tomar cartas sobre el asunto.
"Sevilla lo hizo, por ejemplo, en los Juegos Olímpicos que tuvieron en su momento, transformaron la ciudad. Barcelona también lo hizo, aunque cometieron algunos errores de hacer algunos elefantes blancos, acá hay que hacer una infraestructura que después sirva, que tenga algunas modificaciones y que sirvan para el país, para seguir desarrollando la cultura, el deporte, entre otras cosas".
Mientras tanto, el reloj sigue su marcha y hasta el momento, el panorama se vislumbra sombrío. ¿Se podrá revertir la situación antes de la fecha límite?
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Con información de RPP y foto de cabecera de Depor
