José Luna Gálvez ha declarado ser un “empresario emergente” que no necesita de la política para hacer fortuna y por eso prefiere cobrar un sol desde que empezó su carrera en el Congreso en el año 2000, donando el resto de su sueldo mensual de S/.15.000 a causas benéficas. Ahora, en plena campaña electoral, el también dueño de la Universidad Privada Telesup pretende llegar por quinta vez al Parlamento encabezando la lista de Solidaridad Nacional -partido del alcalde de Lima, Luis Castañeda Lossio, del cual es el principal financista- con la propuesta de aumento del sueldo mínimo. ¿Pero cómo es que este congresista que siempre habla de números nunca menciona las cifras de su patrimonio, que parece crecer exponencialmente con cada año en el Legislativo? Una investigación de Andy Livise y Aramís Castro para el portal de periodismo de investigación y análisis de datos Convoca para La República revela más que un dato interesante sobre este asunto.
A partir de las declaraciones juradas de bienes e ingresos que presentó Luna Gálvez al Parlamento y a la Contraloría General de la República contrastadas con la Superintendencia Nacional de Registros Públicos (Sunarp), visitas a sus propiedades y consultas con diversas fuentes; Convoca.pe descubrió la historia de la compra de un predio que José Luna adquirió cuando era congresista pero que no aparece en ninguno de estos documentos requeridos por ley.
Se trata de un inmueble de cinco pisos ubicada en la cuadra 6 de la avenida Próceres de la Independencia, en San Juan de Lurigancho, en el que cada una de sus plantas funcionan diversos negocios como un call center de la Universidad Telesup, la compañía de sistemas de vigilancia y seguridad Romaní Soluciones, entre otros, ligados al congresista 'solidario' y a sus familiares.
LA HISTORIA DE LA CASA OCULTA
En agosto de 2010, Luna Gálvez compró un inmueble de 176 m² en la urbanización Los Rosales, en Surco, por US$163.000 pero lo vendió a los cinco meses, en plena campaña electoral de 2011, a Martha Elena Yoctún Ramírez, quien solo pagó US$13.000 al contado sin presentar ante el notario un “medio de pago”, como consta en la minuta de compra-venta.
El resto quedó hipotecado a nombre del legislador con la promesa de pagos mensuales de US$1,500 sin fechas programadas. Lo curioso es que Yoctún Ramírez no es una desconocida para Luna Gálvez, ya que desde los 25 años fue gerente y fundadora de tres de las empresas del consorcio Telesup, universidad en la que también estudió.
Coincidentemente, dos días antes que José Luna adquiriera el inmueble en agosto de 2010, Martha Elena Yoctún compró la vivienda contigua por US$90.000 a Elizabeth Marroquín Postigo. Convoca.pe comprobó que ambas viviendas funcionan como una sola casa, y según los vecinos y el vigilante de la cuadra, ahí residen Yoctún Ramírez y el congresista Luna Gálvez. La casa blanca no aparece en las declaraciones juradas.
Desde que en 2001 esta norma obliga a los funcionarios públicos a declarar su patrimonio, José Luna solo ha presentado declaraciones juradas al inicio de su gestión legislativa en 2006 y 2011 ante el Congreso, y a la Contraloría solo en 2011, 2012 y 2013. En los documentos elevados a esta última entidad y a los que accedió Convoca.pe, aparecen cinco viviendas. De dos propiedades adquiridas antes de llegar al Congreso, el congresista pasó a tener cinco, y de tres vehículos llegó a seis, uno de ellos que llegó a costar S/.222.000 (US$80.800).
Este incremento en su patrimonio le demandó al parlamentario de Solidaridad Nacional una inversión de S/.1'819.063 (US$548.240), según Sunarp y el tipo de cambio del año en que se compró cada inmueble. Es decir, invirtió tres veces más de lo que le costaron sus dos primeras casas, mientras que la Universidad Telesup adquirió hasta 13 propiedades por un valor de S/.27'989.000 (US$9'929.000) desde su ingreso Congreso.
José Luna adquirió sus viviendas y vehículos más costosos después de convertirse en parlamentario. En noviembre de 2001 compró un inmueble por S/.894.000 (US$255.000) en San Isidro luego de que en julio de 2001, el hoy encarcelado exasesor presidencial Vladimiro Montesinos declarara a la justicia que le pagó una coima a él y a otros legisladores, a cambio de votar a favor de los proyectos de ley de la bancada fujimorista o integrar sus filas.
La acusación de Montesinos Torres -respaldada en un principio por su exsecretaria Matilde Pinchi Pinchi- provocó que Luna Gálvez fuera suspendido en su cargo y sea investigado por la justicia. A pesar de su situación legal, el parlamentario fue reelegido en 2006 y recién en julio de 2009 se le levantó la suspensión al ser absuelto por el Poder Judicial.
Sin embargo, en sus declaraciones juradas de la Contraloría no figura la casa de San Juan de Lurigancho que el congresista reportó como su domicilio en su hoja de vida ante el Jurado Nacional de Elecciones en los comicios de 2011, pese a que en el Registro Nacional de Identidad y Estado Civil (Reniec) aún aparece como su vivienda, pero él no vive ahí, según comprobó Convoca.pe. Quien figura como dueña en registros públicos es su madre Paula Patrocinia Gálvez Bellido, quien falleció en febrero de 2014. Si José Luna no reside en ese inmueble, ¿cuál es su verdadera casa? ¿La de la Urb. Los Rosales? Queda en el parlamentario el responder.
TODO QUEDA EN FAMILIA
Pero eso no es todo ya que José Luna, en pleno ejercicio parlamentario, obtuvo cargos y poderes en empresas de su consorcio Telesup que contrataron con entidades estatales desde su ingreso a la política reportando -según sus declaraciones juradas- un ingreso mensual del sector público de S/.15.600 y un incremento de sus ingresos mensuales en el sector privado de S/.41.000 en 2006 a S/.240.000 en 2012.
Según el reglamento del Congreso, José Luna debe ser un legislador a tiempo completo. ¿Cómo hace para obtener ingresos del sector privado? Convoca.pe construyó un registro de datos de las empresas vinculadas al parlamentario y a sus familiares y encontró que cinco de las seis compañías del consorcio Telesup, así como tres hermanos del parlamentario (Juan, César y Alfonso Mario Luna Gálvez), contrataron con 48 entidades del Estado, entre 1999 y 2015, por más de S/.396.000, según el registro de proveedores del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF). Ninguna de estas empresas brindó servicios al Estado antes de que Luna llegara a la política.
El consorcio de la familia Luna está conformado por la universidad Telesup, los institutos Telesup E.I.R.L, Intur Perú, Instituto de Investigación Socioeconómico Latinoamericano (ISEL), Instituto Socio Económico y Sociedad Nacional de Telemática Ciencia y Tecnología. De todas estas empresas la más rentable es la casa de estudios, que gracias a sus 14 sedes en todo el país (y uno en Miami), sus ingresos han aumentado de S/.9'104.656 en 2009 a S/.39'772.000 en 2013, según la consultora Perú Top Publications.
Cabe preguntarse cómo es que con todo este enorme patrimonio cuatro de las empresas del mencionado consorcio registran deudas coactivas en la Superintendencia Nacional de Aduanas y Administración Tributaria (Sunat) por cerca de medio millón de soles, la mayor parte por no pagar aportes a Essalud y a la Oficina de Normalización Provisional (ONP) en beneficio de sus trabajadores, mientras el legislador está en campaña contra lo que él llama los “abusos” del sistema privado de pensiones, bajo el eslogan de que “La plata es de la gente”.
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Con información de La República y Convoca.pe
