Post: Ernesto Castillo Páez: La impunidad en un caso de desaparición forzada

La impunidad siempre estuvo latente y ahora se ha cometido. El caso de la desaparición forzada del estudiante de la PUCP, Ernesto Castilo Páez, cuyo paradero se desconoce desde 1990, estuvo amenazado por el peligro de que los responsables de este crimen salgan de la cárcel.

El 21 de octubre de 1990, el estudiante de sociología de la PUCP, Ernesto Castillo Páez, fue desaparecido a manos de efectivos de la Policía Nacional, cuando hacía una encuesta en Villa El Salvador acerca de las consecuencias del "Fuji-Shock". Ese mismo día, se realizaron acciones de propaganda senderista en dicho distrito. Efectivos policiales lo detuvieron a plena luz del día y nunca más volvió a aparecer ante su familia.

- Aquí un acto conmemorativo en la PUCP en el 2012.

En 1991, se archivó el primer proceso por la desaparición de Castillo Páez. Ante ello, los familiares de la víctima acudieron a instancias internacionales y en 1997 la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH) pidió al Estado peruano que investigue, juzgue y sancione a los responsables, así como ubicar y entregar los restos del desaparecido.

En el 2006, la justicia peruana condenó a 16 años de prisión al oficial PNP en retiro, Juan Carlos Mejía León; y a 15 años a los sub-oficiales PNP, Manuel Arotuma Valdivia, Carlos De Paz Briones y Juan Aragón Guibovich, por la desaparición forzada de Castillo Páez.

Desde el 2013, Mejía León viene intentando salir de la cárcel a través del beneficio penitenciario de la semi-libertad. En ese momento, los familiares de la víctima denunciaban amenazas que vendrían de los condenados y LaMula.pe también estuvo para informar sobre lo sucedido.

La posibilidad de que el culpable de la desaparición del estudiante quedó en manos de la Sala Penal Nacional. En setiembre del 2013, la Defensoría del Pueblo señaló que este beneficio no se aplica a este caso. De acuerdo a los artículos 48 del Código de Ejecución Penal y 320 del Código Penal, la semilibertad no se puede aplicar para los agentes condenados por delitos de desaparición forzada. Un mes después, esta instancia judicial le negó la semilibertad a Mejía León.

Parecía que la justicia no daba marcha atrás en este caso. Pero en abril de este 2015, el condenado pidió, otra vez, el beneficio penitenciario y, finalmente, el 12 de noviembre el juez Ángel Ernesto Mendivil Mamani del Segundo Juzgado Penal Nacional lo dejó en libertad condicional sin que este haya colaborado para ubicar los restos de la víctima.

"Son 25 años los que venimos litigando con el Estado y creo que miles de familiares no lo han hecho por las dificultades que se tiene desde el punto de vista económico: la asesoría legal, la representatividad ante los juicios; incluso obtener la confirmación de la sentencia de la Sala Penal demoró dos años, porque era el primer caso en el que se juzgaba y sentenciaba a violadores de los derechos humanos. Fue difícil y agotador y aún no sabemos dónde está mi hijo", dijo a Noticias SER, Cromwell Castillo, padre de Ernesto.

En una conferencia de prensa realizada hoy, el padre del estudiante desaparecido le dijo al condenado Mejía León:

"Si sales a decir la verdad sobre dónde está Ernesto, yo te perdonaría".

En el contexto de la campaña #Reúne, que tiene el objetivo de recordar a la opinión pública las aproximadamente 16 mil desapariciones forzadas durante el conflicto armado interno, es lamentable que se promueva la impunidad.

Mientras los culpables gozan de libertad, hasta ahora los familiares se preguntan "¿Dónde está Ernesto?".