Con gran pompa y poca sustancia, César Acuña (sí, el político de la 'raza' distinta que no ha leído un solo libro en su vida, según confesión de parte) formalizó este miércoles su ya conocida ambición de ser presidente del Perú. Para ello tuvo que renunciar al Gobierno Regional de La Libertad, cargo en el que solo duró 10 meses.
El dueño de Alianza Para el Progreso (APP) y de la Universidad César Vallejo llevó a toda su 'portátil', incluidos los entrenadores de sus equipos de fútbol y vóley, Franco Navarro y Natalia Málaga (esperamos que no bajo amenaza de despido), al hotel Sheraton de Lima, para asegurar un auditorio de aplausos sonoros y fáciles.
Pero este video del anuncio de su candidatura es una muestra más de por qué no debería ser presidente.
Aquí resuminos algunos de los motivos:
1. Anuncio estuvo plagado de lugares comunes y clichés
De acuerdo a lo que dijo en su anuncio de este miércoles y de lo que suele declarar, se puede colegir que Acuña no tiene un discurso político. No articula ni desarrolla ideas, solo frases que en verdad no dicen nada. "Mis intereses no son personales, postulo por los 30 millones de peruanos" , "No vivo de la política", "sueño con un país diferente", "Quiero que mi sueño sea tu sueño", y un largo etcétera.
2. Habla de sí mismo en tercera persona
Los estudiosos de la conducta humana sostienen, sobre la base de estudios, que hablar en tercera persona de uno mismo es síntoma de un problema que llaman Trastorno Narcisista de la Personalidad.
3. Ni una sola idea o propuesta
Al parecer, Acuña no tuvo tiempo de preparar un discurso propio. Lo que hizo fue leer uno que le alcanzaron con un contenido muy similar a lo que dicen sus spot publicitarios de televisión.
Encima, en un momento de su presentación, se perdió en la lectura y le costó unos segundos volver a retomarla. Felizmente nadie lo pifió. Ah, verdad, su portátil copaba el auditorio.
4. 'Plata como cancha'
A fines de julio de este año se filtró un video revelador sobre Acuña, que se bautizó como "plata como cancha" y se viralizó rápidamente. En él 'revela' su 'estrategia' para llegar a Palacio.
4. No tiene palabra. Hizo todo lo que prometió no hacer
Podríamos decir que Acuña se aburre rápido de los cargos que ocupa, pero en realidad parece que padece de una desbordada y desesperada hambre de poder.
En 2010 fue elegido como alcalde de Trujillo, pero sus deseos de abarcar más no pudieron esperar y, en abril de 2014, antes de acabar su mandato, dimitió para postular a la presidencia regional de La Libertad. Y ahora volvió a hacer lo mismo, pese a que juró y rejuró que no renunciaría.
5. Denuncias y corrupción
En agosto de este año, la Fiscalía pidió nueve años de cárcel para César Acuña por abuso de autoridad con fines electorales. El político norteño de la 'plata como cancha' es acusado de haber ofrecido dinero a cambio de votos para reelegirse cuando se desempeñaba como alcalde de Trujillo.
Este es el segundo pedido de cárcel contra César Acuña. La Fiscalía Anticorrupción también solicitó seis años de prisión y su inhabilitación por la entrega de S/.57.000 para un proyecto cinematográfico que no se habría ejecutado.
Acuña también es investigado por el Congreso de la República por sus vínculos con Martín Belaunde Lossio y por irregularidades en obras ejecutadas en su gestión edilicia.
6. El modelo Acuña
En el 2012, una investigación, elaborada para PODER y LaMula.pe por la agencia INFOS, demostró el uso irregular de subsidios municipales por parte del líder de Alianza Para el Progreso con el fin de obtener apoyo político en la segunda ciudad más importante del país.
Los pormenores son sorprendentes y serán por buen tiempo motivo de estudio del Ministerio Público y los sistemas de control estatal, audazmente vulnerados. Todas las informaciones están documentadas.