La expresidenta del Consejo de Ministros, Violeta Bermúdez, alertó sobre la urgencia de retomar la reforma de la Policía Nacional del Perú (PNP), un proceso iniciado durante el gobierno de transición de Francisco Sagasti que fue bloqueado tras la modificación de normas por parte del actual Congreso.

“Durante el gobierno de transición aprobamos unos lineamientos. El propio Ministerio del Interior conformó una comisión de trabajo con personal policial para revisar su organización y modernizarla”, explicó Bermúdez en el programa Al Filo de #LaMulaStream.

En entrevista con Javier Torres, Bermúdez explicó que esa reforma se articulaba desde el Ejecutivo como una necesidad crítica ante el avance de la corrupción dentro del aparato estatal.

“Sabemos que así como está la corrupción en diversos niveles de gobierno, la Policía Nacional también juega un rol bastante crítico”, subrayó.

Bermúdez defendió la decisión del expresidente Francisco Sagasti de remover a altos mandos policiales como una prerrogativa legítima del Ejecutivo.

“Era tal la prerrogativa presidencial que este Congreso ha modificado las normas para que ya no lo sea”, denunció.

La también abogada sostuvo que el debilitamiento del equilibrio de poderes es uno de los problemas más graves que enfrenta la democracia peruana.

“Nos hemos des-democratizado y nos seguimos des-democratizando. Se ha perdido el balance de poderes”, afirmó.

Durante su intervención en el evento Tejiendo Ciudadanía, organizado por el PNUD, el IEP, La República y la Red Científica Peruana (RCP), Bermúdez amplió su diagnóstico: “En la PNP hay gente responsable y comprometida, pero también mucha corrupción, sobre todo en zonas sin presencia del Estado, donde no llegan la Contraloría ni los gobiernos regionales”.

A su juicio, la reforma de la Policía no puede seguir postergándose.

“Tenemos que tomar el toro por las astas. Si algunos miembros de la Policía están aliados con las economías ilícitas, no hay forma de que la ciudadanía denuncie. Terminas acusado o asesinado”, advirtió.

La ex primera ministra advirtió que la falta de control estatal en amplias zonas del país convierte a la Policía en un factor decisivo, ya sea para proteger a la ciudadanía o para facilitar la expansión del crimen organizado.

“Una reforma integral de la PNP es clave si queremos recuperar la institucionalidad y garantizar seguridad democrática”, concluyó.