La comunidad nativa San Francisco, de la etnia shipibo, se encuentra en medio de un conflicto judicial que enfrenta a su jefe electo, Richard Ochavano, con el anterior líder, Marangoni Urquía. Este conflicto, que será resuelto en una audiencia judicial programada para el 18 de noviembre, tiene su origen en desacuerdos sobre la dirección de la comunidad y su relación con la empresa de palma aceitera Ochosur.
Ochavano fue elegido jefe de la comunidad en febrero de 2023, en reemplazo de Marangoni, quien culminaba su mandato. Sin embargo, Marangoni se negó a entregar el cargo y la documentación requerida, generando una disputa que llevó a Ochavano a acudir al Poder Judicial para validar su elección.
“Esperamos que el juez dé el veredicto final a favor de nuestro jefe para impedir la entrada de empresas de palma aceitera en nuestro territorio”, afirmó Ochavano en declaraciones a LaMula.pe.
Según miembros de la comunidad, el conflicto comenzó cuando Marangoni propuso permitir la entrada de Ochosur en sus territorios, lo que generó una profunda división entre las familias de San Francisco.
Ochavano y su equipo consideran que la comunidad no es agrícola y que su subsistencia depende de actividades tradicionales como la artesanía, el turismo y el chamanismo.
“San Francisco es conocida por su cerámica y sus rituales de ayahuasca. No somos una comunidad agrícola”, expresó Ochavano.
La situación ha generado un vacío de liderazgo, pues sin la documentación oficial, Ochavano no ha podido registrar su cargo en la Superintendencia Nacional de los Registros Públicos (Sunarp), lo cual afecta el desarrollo de proyectos comunitarios. Este vacío, según el jefe electo, ha incrementado la pobreza y la inseguridad dentro de la comunidad.
“La comunidad está abandonada. Hay más pobreza y nuestros jóvenes están cada vez más divididos”, comentó Ochavano.
Ante este escenario, Ochavano pidió al Estado que respete y proteja los territorios indígenas, y que evite la intervención de empresas sin considerar el impacto cultural y ambiental.
“Pedimos a las autoridades que defiendan nuestros derechos como comunidad indígena. No permitiremos la entrada de palma aceitera en nuestro territorio mientras yo sea jefe”, concluyó.
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