En el primer día de protesta contra la extorsión y la inacción gubernamental, Herman Mendieta, secretario de defensa de la Asociación Nacional de Integración de Transportistas (ANITRA), denunció que algunos agentes de la Policía Nacional del Perú (PNP) estarían coludidos con delincuentes que extorsionan a transportistas en Lima y Callao.

En entrevista con Radio Exitosa, Mendieta lamentó que los trabajadores del sector transporte estén enfrentando el acoso tanto de criminales como de policías.

Según el dirigente, los transportistas que se niegan a pagar extorsiones son perseguidos por la Policía, lo que indica una posible complicidad.

“Si uno paga puntualmente, la Policía no molesta, pero si se deja de pagar, empiezan las persecuciones”, afirmó. Esta situación, dijo, coloca a los conductores en un escenario de inseguridad constante y desprotección.

Mendieta también cuestionó el uso indebido del pase gratuito en el transporte público por parte de algunos agentes policiales. Aunque los policías utilizan su credencial para evitar el pago de pasajes, no intervienen cuando ocurren delitos dentro de los vehículos, contó.

“Debemos darle pasaje solo cuando están uniformados, así el uniforme surtirá un efecto disuasivo”, señaló.

Esta denuncia se suma a la creciente preocupación por el aumento de extorsiones y sicariato en el sector transporte y a nivel general. 


El crimen cogobierna

En declaraciones a LaMula.pe, Enrique Castro Vargas, exdirector de Seguridad Ciudadana del Ministerio del Interior, resaltó que "la situación es crítica".

“Lo que vivimos ahora es similar a los acuerdos de El Salvador, se asemeja a los pactos con las maras salvatruchas. Se necesita una respuesta inmediata", dijo el experto en seguridad ciudadana.

Castro Vargas recordó que el Congreso prometió legislar sobre extorsión, pero no hay seguimiento. Propuso que la supervisión interna en la Policía requiere una reforma profunda con intervención del Ministerio Público en la Inspectoría para funcionar adecuadamente y acabar con el "espíritu de cuerpo".

“La Policía debe rendir cuentas y ser fiscalizada permanentemente. El crimen organizado está cogobernando y, en el Congreso, algunos representantes gestionan normas para su beneficio”, señaló.

El exdirector de Seguridad Ciudadana del Mininer resaltó la necesidad de una fiscalización continua del desempeño policial y el uso de recursos:

“Los gobiernos locales, el Ministerio de Economía y el Ministerio del Interior asignan presupuestos, pero no hay un seguimiento adecuado. Sin fiscalización, el problema solo se agravará”, dijo.



[Foto de portada: Andina]


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