El Papa Francisco ha ordenado la expulsión de 10 miembros del Sodalicio de Vida Cristiana, entre ellos el exarzobispo de Piura y Tumbes, José Antonio Eguren, y el fundador Luis Fernando Figari, debido a abusos físicos, espirituales y de conciencia contra menores de edad. La decisión fue anunciada a través de un comunicado emitido por la Nunciatura Apostólica del Perú, donde se pidió perdón a las víctimas y se subrayó la necesidad de justicia y reparación.
El comunicado detalló los crímenes cometidos, que incluyen violencia física, métodos sectarios para quebrar la voluntad de subordinados, instrumentalización de la información obtenida en la dirección espiritual y acoso laboral. Además, se denunció el encubrimiento de estos delitos por parte de la cúpula del Sodalicio. La Iglesia instó a esta sociedad de vida apostólica a emprender un proceso de reforma profunda para evitar que estos abusos se repitan.
La expulsión de los 10 miembros es vista como un paso importante, pero insuficiente, en la lucha contra el abuso dentro de la Iglesia Católica. Organizaciones y defensores de las víctimas continúan exigiendo transparencia, justicia y el compromiso de la Iglesia para evitar que estos hechos se repitan.
En agosto pasado, tras la el anuncio de la Conferencia Episcopal Peruana de la expulsión de Luis Figari, fundador del Sodalicio, el periodista Pedro Salinas señaló que esta medida debería ser el preámbulo de la supresión del Sodalicio.
"La expulsión es simplemente una suerte de preámbulo de algo mucho más importante y quizás hasta histórico para la iglesia católica latinoaméricana porque yo creo que lo que se viene es la supresión del Sodalicio", indicó el periodista.
[Foto de portada: EFE]
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