El Departamento para la Cooperación y Observación Electoral (DECO) de la Organización de los Estados Americanos (OEA) ha publicado un informe contundente cuestionando la legitimidad de las elecciones presidenciales en Venezuela, celebradas el 28 de julio de 2024. Según el documento, el proceso electoral estuvo plagado de "ilegalidades, vicios y malas prácticas" que reflejan un patrón recurrente en los comicios recientes del país.

El informe destaca que la falta de transparencia en el proceso de conteo y la ausencia de publicación de las actas de votación impidieron una verificación independiente de los resultados.

"No es posible reconocer la validez de los resultados anunciados por el Consejo Nacional Electoral (CNE)," afirmó el DECO, subrayando que los datos presentados carecen de sustento documental público y son ampliamente contradictorios con las informaciones disponibles de diversas fuentes.

Además, se registraron "errores aritméticos" en los datos divulgados, lo cual incrementa las sospechas de manipulación.

Entre las irregularidades observadas, el informe señala la "inhabilitación arbitraria de candidaturas opositoras", incluyendo a la conocida figura de María Corina Machado. Este acto, junto con el uso indebido de recursos estatales y la intimidación a votantes y opositores, comprometió seriamente la equidad del proceso electoral.

"La falta de acceso a medios de comunicación para los candidatos de oposición y la ausencia de observadores electorales independientes" creó un ambiente propicio para la manipulación y el control del voto, según el informe.

La OEA también denunció la represión de la disidencia, manifestada en agresiones y detenciones de periodistas y activistas, calificándola como una "violación grave a los derechos humanos." Este ambiente represivo, combinado con la parcialidad evidente del CNE, según la OEA, "demuestra una vez más que el sistema electoral venezolano está al servicio del Poder Ejecutivo Nacional, y no de la ciudadanía".

En su conclusión, el informe afirma que el régimen de Nicolás Maduro "nuevamente ha traicionado al pueblo venezolano, declarando respetar la voluntad popular al tiempo que hace todo lo posible por manipular y desconocer esa voluntad." Ante la falta de confianza en los resultados oficiales y la evidencia de manipulación, la OEA concluye que "los resultados oficiales no merecen confianza ni deberían recibir reconocimiento democrático."

La OEA hace un llamado a la comunidad internacional para que no reconozca estos resultados, señalando que el proceso electoral no cumplió con los estándares mínimos de transparencia y equidad que garantizan una verdadera expresión de la voluntad popular. La crisis política en Venezuela sigue generando preocupación y rechazo en la región y a nivel mundial, mientras el pueblo venezolano continúa enfrentando un contexto de represión y falta de garantías democráticas.

Lee el informe completo aquí:


[Foto de portada: EFE/Lenin Nolly]


Más en LaMula.pe:

"Familiares de víctimas de la represión en Perú piden apoyo moral y psicológico": Jacqueline Fowks

"Conseguir justicia en Perú pasa por un cambio político": Paulo Vilca

Fiscalía denuncia a Dina Boluarte y exministros por muertes en protestas del 2022 y 2023