No los quieren. En una asamblea pública realizada el 29 de julio, ciudadanos de la provincia de Junín acordaron que ni la presidenta Dina Boluarte ni el gobernador Zósimo Cárdenas presidan la ceremonia del Bicentenario de la Batalla de Junín el próximo 6 de agosto. Este acuerdo fue confirmado por Alejandro Gamarra, presidente del Frente de Defensa de los Intereses de la Provincia de Junín, quien señaló que los ciudadanos consideran una burla las promesas incumplidas del Gobierno Central y del Gobierno Regional.
La decisión se da en un contexto de creciente descontento popular. A inicios de julio, la provincia de Junín acató un paro de dos días reclamando un presupuesto de aproximadamente 50 millones de soles para siete proyectos viables. La molestia de los ciudadanos también está relacionada con las restricciones sufridas en 2023, que impidieron que muchos pudieran presenciar el desfile y la ceremonia en homenaje a la histórica batalla.
La impopularidad de las autoridades se refleja en los resultados del reciente informe de opinión pública del Instituto de Estudios Peruanos (IEP). Según el informe, solo un 5% de la población aprueba la gestión de Boluarte, mientras que el 94% desaprueba el desempeño del Congreso. Además, existe una profunda desconfianza hacia los partidos políticos, con un 85% de los encuestados que afirma tener poca o ninguna confianza en ellos.
El rechazo a las autoridades fue evidente en eventos recientes, como el sucedido con Zósimo Cárdenas, quien fue recibido con hostilidad y tuvo que abandonar rápidamente la plaza de Junín, escoltado por la policía.
[Fuente: Huanca York Times, IEP / Foto: Presidencia Perú]
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