La protesta del 19 de julio en Apurímac estuvo protagonizada en mayor medida por organizaciones urbanas, ya que las comunidades campesinas quedaron golpeadas por las primeras marchas, señaló, en La Mula TV, Karina Bueno, miembro del equipo de la Asociación Pro Derechos Humanos (Aprodeh).

En entrevista con Javier Torres, Bueno contó que ayer hubo una "masiva movilización con características principalmente urbanas" con participación de organizaciones tradicionales como la Confederación General de Trabajadores del Perú (CGTP), Construcción Civil, el Sutep y colectivos juveniles.

"A diferencia de las marchas de diciembre del año pasado, donde la predominancia era rural de comunidades campesinas que se habían trasladado a las ciudades, en esta oportunidad ha sido liderada por estos gremios", señaló.

La integrante del equipo de Aprodeh Apurímac explicó que este cambio se debe a que las comunidades campesinas quedaron golpeadas, tanto a nivel físico como emocional, durante las primeras manifestaciones contra el Gobierno.

"Luego de las marchas también han sido perseguidas desde una perspectiva racista y clasista, muchos manifestantes han sido detenidos arbitrariamente y ahora llevan investigaciones muy serias por disturbios, que además avanzan muy rápido las investigaciones, a diferencia de las muertes o ejecuciones extrajudiciales o los heridos, las denuncias por heridos o por torturas que francamente sentimos que están paralizadas y que además las han llevado a Lima, en cambio las investigaciones por disturbios a los manifestantes sí han tenido muchísimo avance y eso ha generado también temor, ha generado un repliegue de las fuerzas, mucha polarización incluso discusiones al interior de las comunidades campesinas preguntándose de qué han servido estas marchas, si al final los muertos se los han cargado ellos y no hay justicia. Su principal agenda es la búsqueda de justicia y de reparación de esos hechos", explicó.

Por otro lado, Bueno mencionó el impacto económico que ha afectado a las comunidades campesinas, ya que se han movilizado desde sus localidades hasta las ciudades durante días, semanas e incluso un mes.

"Dejaron la chacra, durmieron en las calles, durmieron donde podían y también con grandes riesgos en las ciudades, donde la Polícia los intervino de manera violenta y arbitraria frente a hechos que evidentemente no se han cometido y también han sido golpeados por la ciudadanía, por los pobladores de las ciudades, que prácticamente los consideraban ajenos, les decían que regresen a sus comunidades, que protesten allá, que no son parte de las ciudades, que hay que mantener la ciudad limpia y han salido con polos blancos, diciendo que se retiren con un discurso racista. Con todo eso, yo creo que ha habido un golpe hacia las comunidades", señaló.

Sin embargo, Bueno mencionó que las comunidades estarían evaluando qué hacer en los siguientes días, asumiendo una posición de perfil bajo para evitar la criminalización con la posibilidad de que salgan a marchar, pero en una manifestación que no va a ser anunciada con anticipación. "Si van a salir, lo harán de un momento a otro y con otras estrategias", dijo.

Mira la entrevista completa en La Mula TV:


[Redacción: Jorge Paucar Albino]


Más en LaMula.pe:

Lincoln Onofre: "En Ayacucho, la gente que trabaja del día a día está en contra del paro"

Oracio Pacori: "La preocupación de la población es cómo nos reactivamos económicamente"

Jesús Manya sobre las protestas: 'Ni el estado de ánimo ni los bolsillos permiten un paro'