En la misa y Te Deum, por Fiestas Patrias de manera virtual, el arzobispo de Lima, Carlos Castillo, lamentó las miles de muertes a causa del COVID-19. Desde la Catedral de Lima, manifestó que la pandemia por el coronavirus ha dejado gran cantidad de personas fallecidas que se han convertido en mártires de la patria por sus labores realizadas en medio de la emergencia sanitaria.

Castillo puso como ejemplo a Mario Romero, el ‘Ángel del Oxígeno’, Santiago Manuín, líder histórico Awajún, y muchísimos otros y otras personas que perdieron la vida por el virus, pero luchando por el bien común y por ello se convirtieron en personajes icónicos durante la pandemia. "En tan pocos meses, nunca tuvimos tantos mártires de la patria, en quienes se unió la iniciativa individual y el sentido del bien común. Mario Romero, 'el ángel del oxígeno', Santiago Manuín, líder histórico Awajún, y muchísimos otros y otras", afirmó el arzobispo de Lima.

Señaló también que otras luces que han surgido en medio de la oscuridad que deja la pandemia se traducen en el esfuerzo de grupos ciudadanos de las más diferentes profesiones y oficios. “Hoy, sobre todo, médicos y trabajadores de la salud, soldados y policías, trabajadores que sostienen los servicios urbanos, campesinos que envían los alimentos, el empresariado, asociaciones de la sociedad civil, iglesias y comunidades religiosas”, manifestó. 

Castillo aseguró que en todos aquellos que han atendido a los enfermos se ven signos de un desprendimiento cada vez mayor y se avanza hacia una nueva manera de vivir y comprender nuestra realidad. “Nos recuerdan los tiempos primeros de la República por la participación de las provincias y la ayuda mutua para lograr la libertad. Estas luces nos alientan”, resaltó.

"Aún hemos de aprender a superar la estrechez con la anchura, el monopolio con la sana competencia, la mezquindad y la corrupción con la ganancia adecuada y justa, el dominio de la naturaleza con su cuidado, la salud como negocio con la salud como servicio", aseguró.

Asimismo, rememoró las palabras del papa Francisco en su visita a Perú: “La pandemia nos ataca, pero también la frivolidad y el individualismo de décadas. El sujeto humano pobre, suele estar debilitado sin norte común, ni organización, ni esperanza”. Monseñor Castillo evocó de esta manera al sumo pontífice en su visita al Perú. 

“El papa valora los movimientos sociales y la participación activa, organizada y consciente de las bases de la sociedad. Nos lo dijo claramente: no se dejen robar la esperanza”, comentó.

De otro laso, sostuvo que la crisis de la pandemia por la COVID-19 afecta al país y al mundo a tal punto que “todo parece oscuridad”. “¿Cómo no sentir confusión si nos invade el dolor ante cada enfermo y cada fallecida y fallecido? Junto a toda América Latina seguimos estando entre los países más afectados. ¿Cómo celebraremos nuestro Bicentenario si estará marcado por la pandemia?”, aseveró. 

“Quizás, la gran luz para estos días, como entre 1821 y 1824, llega del clamor popular de los sencillos”, añadió. 

Así como se refirió al Papa Francisco, el arzobispo de Lima citó dos versos de César Vallejo para reflejar el sentir de la población frente al coronavirus. 

- "La resaca de todo lo sufrido se empoza en el alma", de Los heraldos negros.

- "Tanto amor y no poder hacer nada contra la muerte", de Masa.

El presidente de la República, Martín Vizcarra, participó de manera virtual en la misa y tedeum por Fiestas Patrias que se oficia en la catedral de Lima. El mandatario, junto a la primera dama, Maribel Díaz Cabello, sigue la ceremonia religiosa desde la capilla de Palacio de Gobierno, considerando los protocolos de seguridad para prevenir el COVID-19. Desde otro ambiente de la sede del Ejecutivo, el jefe del Gabinete Ministerial, Pedro Cateriano, y los ministros de Estado participan también virtualmente de la ceremonia.

(fuente: andina)

Sobre las elecciones

En otro momento, Castillo sostuvo que la pandemia nos ataca, pero también la frivolidad y el individualismo de décadas. Añadió que los pobres y la gente sencilla requiere ser valorados y fortalecidos, y no usados para fines particulares. En ese sentido, afimró que el reto difícil de las próximas elecciones obliga a la cooperación honesta de todo participante y que sería preciso renunciar en vez de sacar ventajas desleales.  

“Los electores no solo debemos informarnos bien, sino cooperar creativamente para impedir ser manipulados. La fe alienta el amor a los hermanos lejanos y cercanos, y redefine el bien individual, integrándolo con el bien común”, reflexionó.
"Laicos y laicas, en sus parroquias y comunidades, ayudémonos a superar todo clericalismo y elitismo indiferente, todo autoritarismo y abusos contra los menores y la mujer, toda espiritualidad individualista, vacía, ausente de amor fecundo y solidario, y todo culto al dios dinero", añadió Castillo.

(Foto de cabecera: Andina)