Desde que se confirmó el primer brote del nuevo coronavirus en China —se detectó a fines de diciembre de 2019 en la ciudad de Wuhan—, ya han pasado más de tres meses y el virus se encuentra en más de 160 países de cinco continentes, con más 1.5 millones de personas contagiadas y casi 90 mil fallecidos a la fecha en todo el mundo.

El virus surge en Asia

En el continente asiático, los casos y las muertes por el nuevo virus se duplicaban cada dos días en enero, pero las autoridades reaccionaron a tiempo y en febrero las medidas de aislamiento extremo que países como China adoptaron empezaron a tener efecto: la propagación del Covid-19 se ralentizó y el brote se logró contener. A la fecha, registran casi 82 mil casos y más de 3.330 fallecidos, pero hace una semana que no registra ningún nuevo caso comunitario.

Otros países del continente, como Corea del Sur, también lograron frenar el brote. En los casos de Japón y Singapur, que actuaron rápido, el virus se contuvo, aunque aún no está claro que hayan controlado la situación del todo. En Japón, hay más de 5.000 contagiados a la fecha y la cifra de fallecidos  supera el centenar. Pero en otros países asiáticos, como Irán —con cifras oficiales poco fiables—, los reportes sugieren que la pandemia sigue una fase exponencial, con más de 67.000 casos y las muertes que superan los cuatro millares de personas. 

El virus explota en febrero en Europa

El primer país europeo donde se detectó el virus fue Italia, donde en apenas una semana se pasó del infectado número 20 al muerto número 20, lo que sugiere que el brote llevaba semanas activo y silencioso, y sin que se tomen medias oportunas como en Asia. Lo que sucedió en Italia hizo saltar la alarmas en los otros países europeos, que redoblaran sus esfuerzos de detección. 

Pero parecía demasiado tarde. Ahora el coronavirus está en fase de crecimiento exponencial en prácticamente todo el Viejo Continente: en Italia, en España, en Alemania, Francia, Suiza o el Reino Unido, los contagios y, sobre todo, los muertos se multiplican cada día, a la espera de que las medidas de confinamiento social comiencen a mostrar sus efectos. 

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), mueren entre el 3% o 4% de las personas que han contraído la enfermedad. En Corea del Sur la tasa de letalidad es del 1,1% y en Alemania del 0,36%, mientras que en China (4%), España (5.1%) o Italia (8.6%) es muy superior, aunque las cifras pueden ser imprecisas, porque en algunos países la letalidad podría ser superior a lo que dicen sus datos, debido a que muchas veces las muertes vienen con retraso.

Además, según expertos, en Italia y España  incluso es probable que su tasa de letalidad sea inferior al ratio actual entre sus muertes y sus casos confirmados, debido a la indetección, es decir, las personas que se contagian de Covid-19 pero tienen síntomas leves o son asintomáticos y que si se contaran disminuirían la letalidad.

En marzo, el virus se instala en América

El coronavirus se demoró más en llegar a América del Sur, pero en la actualidad ya hay varios países en fase exponencial de contagios, como Brasil, que es el país de la región que registra más casos, pero el ritmo es similar al de otros vecinos, como Chile, donde los contagios se duplicaron en solo tres días, al igual que en Colombia y en el Perú, que también mejoraron su capacidad de diagnóstico, lo que explica en gran medida esos incrementos.

La ventaja en Latinoamérica fue que los países tuvieron tiempo de tomar medidas, alertados por lo que sucedía en Europa, lo que ha sido clave para contener el brote. Una explosión de casos como en España o Italia hubiera sido una catástrofe para países como Perú, Colombia, Brasil o México, que tienen sistemas de salud con deficiencias estructurales seculares.

Sin embargo, en este lado del mundo no se puede bajar la guardia. De hecho, el gobierno peruano optó por extender la cuarentena hasta el 26 de abril. Poco antes, el Ejecutivo colombiano hizo lo mismo y decretó el confinamiento hasta el día 27 de abril. La mayoría de países de la región contempla volver a la normalidad de a pocos recién después de la segunda semana de mayo, luego de que ya se hayan alcanzado los picos de contagios casi en todos.

EEUU, el nuevo epicentro del virus 

Con 1.973 muertos en las últimas 24 horas, Estados Unidos registró una nueva y preocupante cifra récord de decesos por causa de la pandemia, 34 más de los 1.939 confirmados hasta la noche del martes 7. En la mayor potencia mundial, los casos confirmados se están duplicando casi cada dos días y los muertos también se doblan cada pocos días.

Nueva York es el estado más golpeado por la pandemia. Ya se han registrado más de 5.000 muertos ahí, con lo que en total los decesos en EEUU llegan a 14.695 la fecha. Los casos positivos superaron la barrera de los 432.000, en un momento en el que las autoridades estiman que el pico de contagiados y víctimas mortales aún llegará en las próximas dos semanas. Es el país con más casos confirmados de Covid-19 en el mundo.

En la cosmopolita Nueva York, las morgues de la ciudad están repletas y se han tenido que instalar hospitales de campaña porque el sistema de salud colapsó.  "Nunca he visto algo así en toda mi vida, esta cantidad de personas que pueden fallecer en un período tan corto", le dice a BBC Mundo Philip Tassi, un trabajador del cementario de Ferncliff en Westchester, pocos kilómetros de Manhattan. "Ni en el 11-S teníamos el número de cuerpos que tienes con esto", sostiene en referencia a los atentados terroristas de 2001 en la ciudad.

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