Tras una victoria arrolladora, el primer ministro del Reino Unido, Boris Jhonson y el Partido Conservador han logrado el mayor triunfo electoral en las elecciones británicas desde los años ochenta. La mayoría absoluta permitirá a los “tories”, nombre con el que se denomina a quien pertenece al Partido Conservador británico, sacar al Reino Unido de la Unión Europea el próximo 31 de enero.

“Lo logramos, lo sacamos adelante, ¿verdad?. Lo hemos hecho, hemos salido del punto muerto. Hemos acabado con el atasco, hemos aplastado el obstáculo. Con este mandando y esta mayoría podremos llevar a cabo el Brexit”, dijo Jhonson cuando se refirió al proceso político en curso que persigue el abandono por parte del Reino Unido de su condición de estado miembro de la Unión Europea.

El Parlamento tiene 650 escaños, y la formación consiguió pasar la barrera de los 326 que se necesitan para obtener esa ventaja. Esta victoria es la mayor del Partido Conservador desde las elecciones de 1987, cuando la primera ministra Margaret Thatcher consiguió 376 escaños en el Parlamento en su tercer mandato consecutivo.

El laborismo, por su parte, ha sufrido su mayor derrota desde 1995 y Jeremy Corbyn, líder de ese partido, ya ha abierto la carrera por sucederle al frente del partido. “Quiero dejar claro que no lideraré el partido en ninguna de las elecciones generales futuras”, declaró. 

Por otro lado, luego de perder un diputado y quedarse con once, el otro gran derrotado de estos comicios ha sido el Partido Liberal Demócrata. Su líder, Jo Swinson, que no logró revalidar su propio escaño, ya anunció que abandonará el puesto.

Desde la oposición, los nacionalistas han arrasado en Escocia y ya anticipan la pelea por lograr un nuevo referéndum de independencia. “En estas elecciones, ha habido un fuerte apoyo a que en Escocia podamos elegir sobre nuestro futuro y no tengamos que acoger a ningún gobierno conservador”, dijo Nicola Sturgeon, líder del Partido Nacional Escocés desde el 2014.

Este es el nuevo panorama político que vive Europa, un camino que no será fácil, pues aunque el 31 de enero el Reino Unido pueda concretar su la salida formal de la Unión Europea, la ejecución efectiva de la medida será recién un año después. Y claro, un año es muy poco tiempo para negociar un nuevo tratado comercial con la Unión Europea, un proceso que normalmente puede llegar a durar más de cinco años.


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