La semana pasada, comuneros de la Federación Campesina de Haquira protestaron contra la minera Anabi S.A.C, a la que denunciaron por presunta contaminación de la cabecera de cuenca del Ccosecmayo, donde han reubicado la planta de lixiviación.
Luego de la intervención del Organismo de Evaluación y Fiscalización Ambiental (Oefa), este martes se ordenó la paralización de las actividades de Anabi en la unidad minera Utunsa, ubicada en los distritos de Haquira, en el departamento de Apurímac, y Quiñota, en el departamento de Cusco.
A través de una medida administrativa, el Oefa ordenó la paralización de forma inmediata de las actividades de acarreo y descarga de mineral en la fase 04 y 03 del pad de lixiviación de la unidad minera.
El pasado 11 de noviembre, el Oefa supervisó la zona ante la denuncia ambiental presentada por Gonzalo Velásquez, alcalde del distrito de Haquira. Tras la observación, concluyeron que había un "inminente peligro y alto riesgo de daño a la calidad del suelo, posible afectación de la calidad del agua subterránea, al ecosistema bofedal y calidad del agua de la quebrada Huayllani, que se encuentra cercano al pad de lixiviación, y en consecuencia a la flora y fauna aledaña, además, a la salud de la población de Huancaumuyto, que se ubica a 6 kilómetros al noreste de la unidad minera".
Esto porque la fase 04 del pad de lixiviación presenta inestabilidad, lo que ocasona que el mineral, que contiene trazas de cianuro, ha sido desplazado en dirección a las áreas de suelo sin impermeabilizar de la fase 03", explicó el Oefa.
"En caso de que la empresa no cumpla con la medida preventiva, se efectuarán las acciones administrativas, civiles y penales correspondientes", precisó el organismo.
El Oefa informó que continuará realizando la supervisión in situ y dictando medidas administrativas cuando se evidencien o se determinen potenciales riesgos que produzcan daños al ambiente o a la salud de las personas y verificando el cumplimiento de estas por parte de la empresa supervisada.
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