Tres agricultores han resultado heridos de bala en medio del operativo policial de erradicación de hoja de coca en el distrito de Mazamari (Satipo, Junín).
El último lunes, cientos de policías llegaron a la zona en cumplimiento del plan de erradicación del Proyecto Especial de Reducción y Control de Cultivos Ilegales en el Alto Huallaga (Corah) promovido por la Comisión Nacional para el Desarrollo y Vida sin Drogas (Devida).
En setiembre pasado, Devida anunció la erradicación de los cultivos ilegales de coca en los distritos de Mazamari, Pangoa y Río Tambo, ubicados en la provincia de Satipo, región Junín, en el Valle de los Ríos Apurímac, Ene y Mantaro (Vraem).
El presidente ejecutivo de Devida, Rubén Vargas, precisó que la campaña de erradicación era en respuesta al pedido expreso de las comunidades indígenas de la zona, que denuncian presencia del narcotráfico en el Vraem.
Iniciado el mes de noviembre, los agentes del Estado llegaron a realizar el operativo. Ante la llegada de los policías a los terrenos de los agricultores, los campesinos fueron a su encuentro para pedirle explicaciones y el motivo expreso de su presencia. Ante la negativa del policía de identificarse y dar explicaciones, los agricultores protestaron y los agentes lanzaron bombas lacrimógenas.
Así comenzó el operativo por el que tres agricultores resultaron heridos de bala. Los afectados fueron llevados por los mismos agricultores al hospital Manuel Higa Arakaki en camillas artesanales.
fotos: waynakuna
El operativo de erradicación de hoja de coca en el Vraem es defendido por el Estado por la denuncia de pozas de maceración en la zona. La Estrategia de Desarrollo del Vraem al 2021, que lidera y articula Devida a nivel multisectorial, es consensuada con organizaciones sociales y los gobiernos locales.
Sin embargo, los agricultores de Mazamari señalan que los pozos de maceración se encuentran en el distrito de Pichari (La Convención, Cusco) y no en su zona. Afirman, además, que el cultivo de hoja de coca es la única fuente de ingresos para sus familias y la erradicación es una medida extrema e innecesaria.
Son considerados como ilegales los cultivos de hoja de coca aquellas producciones que no tengan licencia de la Empresa Nacional de la Coca (Enaco) ni cumplan con entregar todas sus cosechas a esta entidad estatal. Con ello, Enaco tiene el monopolio de la comercialización de la hoja de coca.
Esto rige en cumplimiento de la Convención Única de 1961 sobre Estupefacientes (EEUU), que señala que todos los Estados miembros "están obligados a prohibir el cultivo del arbusto y/o planta de hoja de coca y como tal debe ejercer todas las acciones que tiene en su poder para eliminarlo". En territorio peruano, la hoja de coca es de uso ancestral y medicinal.
