Todo empezó con las masivas evasiones que realizaron los estudiantes escolares de Santiago de Chile en protesta por el aumento de la tarifa de los buses, el Metro y el Tren Central en la provincia. El alza de aproximadamente de 30 pesos se hizo efectivo el 6 de octubre y en los días siguientes los 'chiquillos' decidieron organizarse y no pagar los pasajes en arremetidas que superaron a los policías.
El jueves 17 de octubre, los empleados del Metro compartieron la demanda de los manifestantes y resaltaron la protesta como legítima.
Las protestas se hicieron masivas y la fuerza de la manifestación sobrepasó a los agentes estatales, que no pudieron controlar a la población enardecida.
Ante ello, en lugar de buscar el diálogo con organizaciones sociales representativas o suspender la medida impopular, el viernes 18 de octubre por la noche, el gobierno de Sebastián Piñera decidió declarar estado de emergencia en la capital chilena.
Los militares salieron a las calles en una medida que recordó a la dictadura de Augusto Pinochet.
Sin embargo, esto solo logró unir más a los ciudadanos de Chile, que siguieron manifestándose en las calles a través de 'cacerolazos'.
Y también con manifestaciones violentas como destrucción y quema de buses y ataques a locales privados, como centros comerciales, entre otros.
Ante la revuelta ciudadana, a Piñera no le quedó otra que retroceder: el sábado por la noche, suspendió el alza de los pasajes del transporte público.
Lo que no se esperaba Piñera es que la población ya había sumado más demandas: el alto costo de vida en Chile, la violación constante de los derechos laborales, la desigualdad social y de género, la privatización de educación y salud, las paupérrimas pensiones para jubilados, entre otras políticas públicas neoliberales.
En síntesis, como señalan más de 300 organizaciones sociales chilenas, el problema es el modelo económico. En un comunicado firmado por Base Pública, Fundación Superación de la Pobreza y Comunidad de Organizaciones Solidarias, la sociedad civil señala que:
“Chile reclama un nuevo acuerdo social. La actual crisis de nuestra democracia ha sido gatillada por un modelo que logra generar riqueza, pero que distribuye inequitativamente sus frutos. Adicionalmente existe una profunda desconfianza ciudadana hacia todas las instituciones y entre nosotros/as mismos/as. Esta es la crisis social y política más relevante desde la vuelta a la democracia".
"Como Sociedad Civil hemos alertado insistentemente al mundo político y empresarial de las graves condiciones de desigualdad económica, de género, de dignidad y de trato, de la escasez de espacios de participación y de una intolerable acumulación inmerecida de desventajas en esos millones de compatriotas. Hasta aquí no hemos obtenido una respuesta maciza del mundo político ni del mundo empresarial. Hoy sentimos impotencia y frustración porque también hemos fallado en nuestra tarea".
La protesta se desbordó y se realizaron saqueos en centros comerciales. "Basta de abusos", era el lema. El principal reclamo es contra la privatización de los servicios básicos como la educación, la salud, agua, electricidad, entre otros.
Lamentablemente, hasta el momento, han fallecido ocho personas en Chile durante las protestas. Uno de ellos es un hombre de nacionalidad peruana que murió en medio de un incendio en el supermercado Lider de Matucana en el centro de la capital chilena.
El toque de queda impuesto por el gobierno chileno incluye a la Región Metropolitana, así como a Valparaíso (centro), Concepción (sur), las comunas de Coquimbo y La Serena en la región de Coquimbo (norte), y la comuna de Rancagua (centro). El número de detenidos es de casi 800 personas.
Videos difundidos en redes sociales también muestran la situación que tuvieron que pasar los estudiantes que protestaban contra el alza de pasajes, luego de iniciado el toque de queda, la noche del viernes.
Otro video muestra cómo un manifestante es herido por militares. Al parecer está inconsciente (algunos dicen muerto) y es arrastrado de mala manera por los agentes estatales.
[Foto de portada: AFP]