Se quedó con las ganas. El Pleno del Tribunal Constitucional (TC) rechazó este jueves la incorporación de Gonzalo Ortiz de Zevallos como magistrado, tal como este lo exigía, pese a su cuestionada elección en el Congreso disuelto, que además está bajo investigación fiscal por la irregularidades denunciadas.
La decisión fue adoptada tras un largo debate y quedó sellada con una votación de 5-2. Los únicos magistrados que se pronunciaron a favor de que el primo hermano de Pedro Oleachea, titular de la Comisión Permanente, asuma como tribuno fueron José Luis Sardón y Augusto Ferrero. El resto ─Marianella Ledesma, Eloy Espinoza-Saldaña, Ernesto Blume, Carlos Ramos Núñez y Manuel Miranda─ lo hizo en contra.
De nada valió la presión que ejercieron Oleachea y el propio Ortiz de Zevallos, que el último miércoles volvió a ir hasta la sede del TC para insistir, por tercera vez, a través de un recurso formal, que se fije fecha y hora para su juramentación como magistrado. De hecho, ese mismo día el titular de la Comisión Permanente envió otro oficio exigiendo que designe a su primo como magistrado.
Tanta premura resultaba más que sospechosa, porque además se pretendía que Ortiz de Zevallos reemplace a Eloy Espinosa-Saldaña, tribuno que no es del agrado de Fuerza Popular ni del Apra, en un contexto en el que el TC aún debe resolver el hábeas corpus sobre la liberación de Keiko Fujimori.
El ingreso del primo de Olaechea implicaba el cambio de la correlación de fuerzas del tribunal a favor del fujimorismo, para que el bloque de Ernesto Blume, Augusto Ferrero y José Luis Sardón, sume otro voto y sean mayoría en el pleno del TC. Pero ahora la balanza se mantendrá igual. Al menos de momento.
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