Desde el inicio hasta el final, incluso cargando la copa. El presidente brasileño, el ultraderechista Jair Bolsonaro, quiso robarse las cámaras en la final de la Copa América 2019, que se jugó entre los seleccionados de Perú y Brasil.
Al entrar al campo de juego para unirse a las celebraciones de Brasil por haber obtenido el campeonato, las pifias le llegaron a Bolsonaro desde las tribunas del estadio de Maracaná.
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Después de trece años de gobierno de izquierda en Brasil, llega un gobierno de ultraderecha con Bolsonaro. Desde el 28 de octubre del 2018, dirige las riendas del país. Llegó al poder con un discurso en contra de los derechos de los trabajadores y del medio ambiente, así como machista y homofóbico.
El resultado del partido fue de 3 a 1 a favor de Brasil sobre Perú. Brasil anotó su primer gol en el primer tiempo tras un descuido de la defensa peruana. Perú empató mediante un penal ejecutado con eficacia por Paolo Guerrero en los últimos minutos de la primera etapa. Pero otra falla en la salida del Seleccionada que dirige Ricardo Gareca permitió el segundo gol brasileño. Justo cuando los peruanos buscaban el empate, llegó el tercer tanto de los locales mediante un penal pitado por el árbitro luego de revisar el VAR.
