En la previa al Día Internacional del Orgullo LGTBI, el Congreso peruano abrió las rejas de la Plaza Simón Bolivar para recibir a activistas por la igualdad de derechos y respeto para las personas sexualmente diversas.
La apertura del enrejado había sido autorizada por el presidente del Congreso, Daniel Salaverry. Sin embargo, ocurrió en un momento la Policía intentó impedir el paso de los manifestantes. La congresista Marisa Glave (Nuevo Perú) se encargó de resolver el inconveniente.
Superado este incidente, los activistas defensores de los derechos de las personas lesbianas, gays, bisexuales, transexuales e intersexuales llegaron con pancartas en las que se leía “Defendemos la diversidad sexual”, “Basta de homofobia y transfobia”, ”Educación con libertad e igualdad”, “Necesitamos una ley de género” y “Matrimonio igualitario”.
En la organización del recibimiento de representantes de la comunidad LGTBI al Congreso, debemos resaltar la labor de las congresistas Glave, Indira Huilca, y de los parlamentarios Alberto de Belaunde y Gino Costa.
Es necesaria una dura batalla para el reconocimiento de la diversidad de género, por ello se deben aprobar las leyes que reconozcan los derechos a la identidad de género, matrimonio igualitario y a la no discriminación, señaló Glave.
Por su parte, Huilca afirmó que el Congreso no puede olvidar el derecho que tienen las personas LGTBI. "Todos tenemos derechos y deben ser respetados", dijo.
Belaunde, que llegó acompañado de la activista trans Yefri Peña, rindió homenaje a todos los que fueron asesinados por su orientación sexual o por su identidad de género, por defender sus derechos.
Los congresistas también recordaron que un sector político se opone a la educación con enfoque de género, necesario para combatir la violencia contra las personas LGTBI.
Por ello, están luchando de manera frontal por la igualdad, señaló el congresista Costa que mostró su apoyo a la lucha de las personas trans a través del colectivo Féminas Perú.
