Van a contarlo todo. Luego de haber negado varias veces que hayan sido parte del esquema de corrupción de su socia brasileña Odebrecht, la constructora peruana más grande, Graña y Montero (GyM), decidió también acogerse a la colaboración eficaz en busca de futuros beneficios judiciales. 

Así lo reveló IDL–Reporteros, al precisar que el proceso ya se inició y que incluirá  la entrega de información (testimonios y evidencia documental) al equipo especial Lava Jato sobre denominado ‘Club de la construcción’, la Interoceánica y el Metro de Lima.

Para el Ministerio Público, la información que tiene GyM puede ampliar de forma considerable lo que se sabe hasta el momento del caso Lava Jato y del 'Club de la construcción', el cartel de empresas que se repartían las obras del MTC a punta de coimas, por la magnitud de los proyectos en los que intervino.

Los exdirectivos de GyM, José Graña, Hernando Graña y Mario Alvarado, no son parte de la negociación ni del proceso de colaboración eficaz, precisó el portal periodístico. Además, parte de las confesiones y revelaciones que hará provienen de investigaciones internas hechas por la misma corporación. 

El actual presidente del directorio, Augusto Baertl, embarcó a la constructora en un proceso de reforma interna, y decidió seguir el camino marcado por el acuerdo con Odebrecht. Hay al menos otras cuatro constructoras peruanas que también están negociando la posibilidad de acogerse la misma figura.

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