La bancada aprista rechazó las declaraciones del exfuncionario de Petroperú, Miguel Atala, quien confirmó que actuó como testaferro del fallecido expresidente Alan García para recibir US$ 1.3 millones de Odebrecht en Andorra. En conferencia de prensa, el congresista Jorge del Castillo, acompañado de los demás miembros de su agrupación, respondió a lo dicho por Atala y afirmó que "acusar a un muerto para salvar el pellejo es la típica".
Su colega Mauricio Mulder afirmó que las "imputaciones" de Atala contra Alan García "tienen que ser contrastadas y acompañadas por pruebas". Mulder afirmó que cuando el Ministerio Público haga el acopio de las pruebas, darán una opinión "acreditada" de todo lo manifestado por el exfuncionario de PetroPerú durante el segundo gobierno de García.
Los apristas también se manifestaron sobre lo señalado por el fiscal José Domingo Pérez, quien aseguró durante la audiencia de prisión preventiva contra Luis Nava que Atala tenía temor que un grupo radical dentro del partido, denominado "Fuerza de choque", pueda tomar represalias contra él y sus familiares tras sus revelaciones.
Al respecto, el legislador Elías Rodríguez negó la existencia de este grupo radical dentro del Apra. "No hay ninguna 'Fuerza de Choque'. Nosotros vamos a esperar que esta versión corroborada", manifestó. Esto fue respaldado por Mulder al decir que era absolutamente falso lo dicho por Atala.
Más temprano, Erasmo Reyna, el exabogado de Alan García, afirmó sobre lo declarado por Atala que como el "dicho de cualquier delincuente" quiere conseguir beneficios. "Trata de buscar la liberación de su hijo y para él arresto domiciliario", dijo en declaraciones a RPP.
El ahora defensor de Pilar Nores, exesposa del líder aprista, dijo que el testimonio de Atala no tiene “ningún correlato con la realidad”, ya que la entrega del dinero relatada no coincide con la presencia de García en el Perú en el país, pues vivía en Madrid, España, desde el 2016.
Según el testimonio de Atala Herrera, los US$1.3 millones que recibió de Odebrecht en la cuenta de la offshore Ammarin Investment INC, en la Banca Privada de Andorra, se los entregó personalmente a Alan García, “en varias armadas de 20 mil o 30 mil dólares”, a partir del segundo semestre del 2010, cuando el mismo exmandatario lo llamó y le pidió que vaya a Palacio. Ahí le dijo que ese dinero depositado Andorra era suyo y le pidió que se los vaya dando de forma progresiva hasta el año 2018, que culminó la última entrega.
(Foto de cabecera: Andina)
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