Marisa Glave, congresista de Nuevo Perú y exregidora en la gestión de Susana Villarán, dijo que siente rabia por todo lo revelado por Jorge Barata respecto a la financiación de la campaña contra del No la revocatoria de la exalcaldesa de Lima. “Me gustaría estar en la situación decir que no, que se hizo de manera diferente, pero no puedo. Esa es la realidad (…) la rabia que sí siento y que sé que mucha gente siente tiene que ver que con esta sensación que no cambio nada después de la (gobierno) transición. Cambiaron modales democráticos, pero no la estructura corrupta”, declaró a Canal N.  

Glave reconoció que participó activamente en la campaña contra la revocatoria de Villarán, pero que no tuvo sospechas que el dinero era de origen ilícito porque siempre vio a políticos reconocidos y empresarios que se hacían cargo del tema económico. "Toda la primera etapa de la campaña fue ciudadana. El despliegue fue en la parte final de la campaña. Fue el último mes. Yo quise creer lo que me dijeron en su momento (de la transparencia del proceso)", afirmó.

En ese sentido, reveló que fue ella quien convocó a personalidades como la actriz Mónica Sánchez para que participen de la campaña y señaló que se ha tenido que disculpar con varios de ellos. “Se les pidió, y yo fui una de las personas, que se sumaran [a la campaña]. A ellos y ellas yo les he pedido disculpas y les vuelvo a pedir disculpas porque jamás imaginé que enfrentar a la mafia iba a suponer que alguien terminara cayendo de esa manera”, sostuvo Glave.

La legisladora afirmó que, tras las declaraciones del exrepresentante de Odebrecht ante fiscales peruanos, no se puede decir que Villarán cometió errores en la campaña por el No a la revocatoria, sino que se trataron de delitos. “Yo no puedo decir, por ejemplo, que Susana Villarán y quienes estuvieron en esa decisión, cometieron un error, es un delito y eso es lo que hay que asumir. Se cometieron delitos en ese proceso”, aseveró. 

Además, consideró que la responsabilidad política consiste en dar la cara y no en esconderse, refiriéndose a los intentos de Villarán por evitar dar declaraciones sobre lo dicho por Barata. "No es posible que salgas a enfrentar a una mafia y que el enfrentamiento suponga recibir dinero de otra mafia o de la misma mafia. Eso elimina la razón ética de la movilización ", indicó la parlamentaria. 

Para Glave, las declaraciones de hace dos años del publicista brasileño Valdemir Garreta, quien aseguró que las constructoras Odebrecht y OAS entregaron US$3 millones a la campaña por el No a la revocatoria, eran suficientes indicios para creer que había responsabilidad en la gestión de Villarán.

"Si para mí, declaraciones anteriores eran indicios suficientemente fuertes para creer que había responsabilidad dentro del señor Alan García y su gobierno, dentro del señor Toledo, del señor Humala, no puedo decir algo diferente de la señora Villarán", manifestó.

Como se sabe, Barata ratificó en el cuarto y último día de interrogatorios en Curitiba, Brasil, antes fiscales peruanos que la constructora brasileña apoyó con US$ 3 millones a la campaña de la No revocatoria de Susana Villarán en 2013. También comentó que la exalcaldesa le agradeció por el aporte y que tuvo varias conversaciones previas para conversar sobre la concesión de Rutas de Lima.

(Foto de cabecera: Andina)

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