Esta es la última revelación contra Alan García, lo que provocó que el Ministerio Público pida al Poder Judicial su detención preliminar el último miércoles. El expresidente no toleró la idea de que lo vean preso y decidió quitarse la vida luego de ver a representantes de la Policía Nacional y la Fiscalía en su domicilio.
Lo que motivó la orden de allanamiento de su domicilio y su detención fue lo revelado por testigos protegidos: la empresa brasileña Odebrecht habría pagado más de US$ 24 millones por coimas por la adjudicación de las obras Metro de Lima e Interoceánica Sur durante el último gobierno del fallecido líder del Partido Aprista Peruano.
Resulta que los US$ 8 millones que se pagó a funcionarios del segundo gobierno de García no fue el monto total por corrupción.
"Lo que la Fiscalía trata de establecer es el destino que corrieron los US$ 16 millones faltantes", informó Canal N.
Recordemos que, el domingo pasado, IDL-Reporteros reveló que el exsecretario presidencial de García, Luis Nava, habría recibido más de US$ 4 millones de la empresa Odebrecht por pagos de sobornos. El destinatario final sería el exmandatario, ya que Nava no ocupaba ningún cargo de función pública.
Para que esta cobranza de coimas se haga efectiva, se habría usado toda una red corrupta de intermediarios, integrada por José Luis Nava, José Antonio Nava Mendiola, Miguel Atala Herrera y Samir Atala.
En el caso Lava Jato, a Alan García se le acusó de liderar una organización criminal dedicada al cobro de coimas de las empresas brasileñas Odebrecht y OAS por la adjudicación de diversas obras públicas.