El ministro del Interior, Carlos Morán, dijo que la intervención de la Policía en la casa de Alan García cumplió estrictamente los protocolos establecidos en la diligencia de detención preliminar y allanamiento del lugar, tal como lo autoriza la orden judicial emitida a pedido del equipo especial Lava Jato de la fiscalía.
Según contó Morán, el expresidente, al ser notificado de la orden judicial en su contra, pidió hacer una llamada telefónica a su abogado. Tras ello, ingresó a su habitación y cerró la puerta. Al poco rato, los agentes escucharon un disparo.
Los agentes tuvieron que forzar la puerta de la habitación y encontraron al García Pérez con una herida de bala en la cabeza. Por ello, procedieron inmediatamente a trasladarlo al hospital Casimiro Ulloa, donde su estado es crítico, tras sufrir tres paros cardiorespiratorios durante la intervención quirúrgica a la que es sometido.
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