Más de diez mil personas marcharon, en Lima, pidiendo la salida del fiscal de la Nación, Pedro Chávarry, del Ministerio Público (MP), ya que lo acusan de haber intentado obstruir las investigaciones del caso Lava Jato, en el que están acusados políticos como Keiko Fujimori (Fuerza Popular) y Alan García Pérez (Apra), con quienes habría intercambiado blindaje.
Desde hace meses, se viene cuestionando la presencia de Chávarry en la jefatura de la Fiscalía peruana, pero la gota que derramó el vaso fue lo que hizo la noche del 31 de diciembre del 2018: retiró, de manera arbitraria e ilegal, a los fiscales Rafael Vela Barba y José Domingo Pérez Gómez del equipo especial Lava Jato. Esto se sumó a los cuestionamientos que antes tenía en su contra por haber trabajado con la fujimontesinista Blanca Nelida Colán) y sus vínculos con la organización criminal 'Los cuellos blancos del puerto'.
La medida provocó la indignación de los peruanos, que esa misma noche, a pesar de las fiestas por fin de año, salieron a las calles, en distintas partes del país, para manifestar su rechazo a Chávarry y su apoyo a los fiscales que han logrado la prisión preventiva contra Fujimori y el impedimento de salida del país contra García Pérez, al punto que este terminó mintiendo a todo el país diciendo primero que iba a cumplir con la orden judicial para luego terminar pidiendo asilo a Uruguay, país que finalmente rechazó su solicitud, ya que el aprista afirmaba, sin sustento alguno, que en el Perú se vivía una dictadura y que él era un perseguido político.
Según diversas encuestas, una gran mayoría de peruanos apoya a los fiscales Vela y Pérez por haber logrado avanzar en las investigaciones contra estos políticos acusados de corrupción que se creían intocables. Por ello, las protestas en las calles no se han detenido desde la noche del 31 de diciembre.
Por su parte, el presidente Martín Vizcarra respondió anunciando un proyecto de ley al Congreso para declarar en emergencia al Ministerio Público, lo que ponía en peligro el puesto de Chávarry. Luego de este anuncio, Chávarry decidió reponer a los fiscales, pero el proyecto ya estaba en manos del Congreso y se hizo notar la primera consecuencia negativa de su decisión: la postergación de la firma del acuerdo de colaboración eficaz con la empresa Odebrecht y de las diligencias con ejecutivos en Brasil.
Ahora, la ciudadanía pide, con más energía e indignación, la salida de Chávarry de la Fiscalía, ya que lo consideran una persona que está obstruyendo la justicia. En Lima, la marcha se inició a las seis de la tarde en la Plaza San Martín y tuvo su punto final en los exteriores del local del Ministerio Público. Pasada las nueve de la noche, miles de manifestantes seguían gritando "¡Fuera Chávarry!".
Así fue la marcha en Lima [Fotos de Nicole Hurtado]:
